VIDEO | El papa reclama un uso justo de los recursos naturales para "el bienestar de todos"
El papa Francisco reclamó el sábado una explotación justa de los recursos naturales para promover "el bienestar de todos" durante una visita a Papúa Nueva Guinea, un empobrecido país de Oceanía, pero con amplias reservas minerales
El papa Francisco reclamó el sábado una explotación justa de los recursos naturales para promover "el bienestar de todos" durante una visita a Papúa Nueva Guinea, un empobrecido país de Oceanía pero con amplias reservas minerales.
La riqueza en oro, cobre, níquel, gas natural o madera de este país de 12 millones de habitantes situado al norte de Australia ha atraído inversiones de importantes multinacionales.
Pero esto no ha beneficiado necesariamente a su población, con alrededor de un cuarto viviendo por debajo del umbral de la pobreza y apenas un 10 % de los hogares con suministro eléctrico.
"Su país, además de islas y lenguas, también es rico en recursos de la tierra y de las aguas. Estos bienes están destinados por Dios a toda la colectividad", dijo el pontífice argentino en su primer discurso en la capital, Port Moresby.
Por ello hay que "valorizar los recursos naturales y los recursos humanos, de tal modo que se pueda dar vida a un desarrollo sostenible y equitativo, que promueva el bienestar de todos", continuó ante una audiencia formada por políticos, diplomáticos y empresarios.
El pontífice argentino de 87 años está inmerso en una gira de 12 días por el sudeste asiático y Oceanía, la más larga y remota de su papado, para promover el diálogo interreligioso y llevar su mensaje a las "periferias".
Después de una estancia en Indonesia, Jorge Bergoglio llegó el viernes a Port Moresby, capital de uno de los Estados más empobrecidos e inestables del Pacífico a pesar de sus abundantes recursos naturales.
En un mensaje también aplicable para los creyentes católicos de lugares como América Latina o África, el papa señaló que para explotar estos recursos puede ser "necesario recurrir a competencias más amplias y a grandes empresas internacionales".
Pero "es justo que se tenga debidamente en cuenta en la distribución de los ingresos y la utilización de la mano de obra las necesidades de las poblaciones locales, de manera que se produzca una mejora efectiva de sus condiciones de vida", agregó.
En el caso de Papúa Nueva Guinea, los estudios apuntan a lo contrario.
Según un reporte reciente del Banco Mundial, el producto interno bruto per cápita creció en más de un tercio entre 2009 y 2018, pero el porcentaje de personas que vivían con menos de dos dólares al día se mantuvo.
"La pobreza apenas cambió en este tiempo", dicen sus autores.
- Detener "la espiral de violencia" -
El jesuita argentino es el segundo pontífice en visitar este país, después de Juan Pablo II que lo hizo en dos ocasiones en 1984 y 1995.
El cristianismo es la fe mayoritaria entre sus 12 millones de habitantes, con un 98 % de creyentes, aunque a menudo esta se entremezcla con numerosos ritos indígenas. La mayoría de cristianos son protestantes, aunque un 25 % se declaran católicos.
Este país multiétnico, con más de 800 lenguas autóctonas, es escenario de recurrentes violencias tribales. En enero, unas protestas antigubernamentales contra la reducción de salarios desencadenaron disturbios mortales.
En su discurso, Francisco abogó por "el cese de las agresiones tribales. "Apelo al sentido de responsabilidad de todos para que se detenga la espiral de violencia", reclamó.
Hay pocas estimaciones fiables sobre el número de víctimas mortales de décadas de violencia, pero las agencias de la ONU estiman que esta ha dejado unas 100,000 personas desplazadas.
El domingo, el papa viajará al remoto noroeste de la isla, a un pequeño municipio de 10,000 habitantes donde vive una pequeña comunidad de misioneros argentinos.
Después, el lunes por la mañana partirá de este país en dirección a Timor Oriental, donde estará del 9 al 11 de septiembre en la penúltima parada de esta gira que terminará en Singapur el 13 de septiembre.