En Adiyaman, ciudad devastada por el sismo, "dejamos morir a la gente ante nuestros ojos"
Todas las ciudades de Turquía están de luto desde el terremoto del lunes, pero es sobre todo la rabia lo que domina en la ciudad de Adiyaman
Mientras toda Turquía se moviliza para ayudar a las miles de víctimas del terremoto d que golpeó la provincia de Kahramanmaras, algunas ciudades, como Adiyaman, permanecen en la periferia de las operaciones de rescate.
Todas las ciudades de Turquía están de luto desde el terremoto del lunes, pero es sobre todo la rabia lo que domina en la ciudad de Adiyaman. Situada a unos cientos de kilómetros del epicentro, en el sudeste de Turquía, la ciudad ha quedado literalmente devastada.
Miles de edificios se han derrumbado, el 60% según el partido HDP (tercera fuerza del país, izquierda democrática), pero la ayuda exterior llegó tarde.
"La coordinación es catastrófica”
Frente a los escombros, Abdullahi, voluntario del equipo de rescate, lamenta la falta de organización. “La coordinación es catastrófica", denuncia. “Sí, la búsqueda ha comenzado, pero la mujer cuya voz oímos no ha sido escuchada desde …. Ella y los otros probablemente estén muertos. Hoy sólo se han encontrado las voces de tres personas al otro lado. Aquí, en Adiyaman, se dejó morir a la gente ante nuestros ojos”, explica a RFI.
La cifra inicial de 896 muertos está muy alejada de la realidad para la magnitud de la destrucción. Está prevista una visita del presidente Recep Tayyip Erdogan a Adiyaman, pero la población está enfurecida y la operación de comunicación corre el riesgo de avivar aún más la ira.
“Deficiencias”
"Por supuesto que hay deficiencias, es imposible estar preparado para una catástrofe así", declaró el miércoles el presidente Recep Tayyip Erdogan en su visita a la provincia de Hatay, en la frontera con Siria.
"Algunas personas deshonestas y deshonrosas han publicado declaraciones falsas como 'no hemos visto a ningún soldado ni policía'", aseguró.
Las redes sociales turcas están inundadas de mensajes de personas que se quejan de la falta de esfuerzos de rescate y búsqueda de víctimas en sus zonas, especialmente en la región de Hatay.
La policía turca ha detenido a una docena de personas desde el terremoto del lunes por publicaciones en las redes sociales en las que criticaban la gestión de la catástrofe por parte del gobierno.
Twitter estuvo inaccesible el miércoles y netblocks.org, organismo de vigilancia de la gobernanza de Internet, afirmó que el acceso a la red social estaba restringido "a través de varios proveedores de servicios de Internet en Turquía".