Sirios y libaneses intentan huir hacia Siria por el paso fronterizo de Masnaa
Más de 400,000 civiles huyen del caos y la violencia
Las autoridades libanesas indican que más de 400,000 personas han huido del Líbano hacia Siria desde el pasado 23 de septiembre. RFI se trasladó a la frontera entre los dos países, al encuentro de las familias desplazadas por los bombardeos israelíes.
El paso fronterizo de Masnaa es el principal puente comunicativo entre Líbano y Siria. Esta semana, un enorme cráter fractura la unión entre ambos países.
Eso no impide que centenares de miles de civiles desesperados, incluyendo gente mayor con movilidad reducida, huyan de la mortal ofensiva israelí en el Líbano a través de los escombros.
Entre ellos se encuentra la familia Younes, también con personas mayores y bebés. Son de Markaba, un pueblo libanés pegado a la frontera con Israel. Hablan con RFI en Masnaa después de haber hecho seis desplazamientos consecutivos para huir de las bombas israelíes.
“Primero nos fuimos a Nabatieh, pero Israel empezó a atacar ahí también. Como tenemos bebés, nos fuimos a Tiro”, cuenta Hasan, el hijo mayor de la familia, de 18 años.
Irse a Tiro, la gran ciudad del sur del Líbano, no fue suficiente para encontrar mayor sensación de seguridad. Israel expandía sus ataques y, como en Gaza, lo hacía cada vez con menor distinción entre combatientes y civiles.
Camino a Iraq
“Luego nos fuimos a Beirut. Estuvimos en la calle durante 20 horas, con mucha otra gente que huía del sur del país por los bombardeos. Fuimos al barrio Dahieh, pero cayeron bombas allí y queríamos que la familia esté en un lugar seguro”, recuerda Hasan.
La familia Younes se subió a un autobús de la Media Luna Roja de Siria camino a Damasco para terminar llegando a Iraq. “Quiero lanzar un mensaje a Siria y a Iraq. Muchas gracias de verdad porque solo estos dos países han abierto sus puertas”, dice.
Hasan asegura sin embargo que no se olvidan de su querido Líbano y que volverán cuando ello sea posible. Por ahora, toca poner su familia a salvo.