Netanyahu augura una "dura" respuesta al ataque en Majdal Shams que hace temer la guerra
Israel especula sobre cuál será la respuesta militar al ataque contra Majdal Shams, en el que murieron 12 niños, entre los augurios de las autoridades de la subida de tono en la escalada de violencia con Hizbulá, que el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, alimentó esta tarde al asegurar que la represalia "llegará, y será dura"
Israel especula sobre cuál será la respuesta militar al ataque contra Majdal Shams, en el que murieron 12 niños, entre los augurios de las autoridades de la subida de tono en la escalada de violencia con Hizbulá, que el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, alimentó esta tarde al asegurar que la represalia "llegará, y será dura".
Netanyahu visitó hoy la localidad drusa en los Altos del Golán, ocupados por Israel desde 1967, en un intento de presentar sus condolencias y se topó con unos 200 vecinos que le recibieron al grito de "fuera" y "asesino", según el diario israelí Haaretz.
En una visita a los familiares de los menores fallecidos en el ataque, también el ministro de Defensa, Yoav Gallant, dijo haber hablado con ellos de "la respuesta que se dará al terrible crimen de Hizbulá", sin entrar en más detalles.
Por la noche, en una llamada con su homólogo estadounidense, Lloyd Austin, Gallant hizo hincapié en que el ataque del sábado supuso "una escalada significativa" de la crisis en la divisoria con el Líbano, así como en la determinación de hacer pagar "un alto precio" a Hizbulá de las fuerzas armadas.
En medio de la especulación por cuál será la represalia de Israel al ataque, el gabinete de seguridad del país, que reúne a la cúpula militar y de inteligencia junto a ministros de carteras importantes, autorizó anoche a Netanyahu y Gallant a decidir una respuesta contra la milicia chií libanesa Hizbulá, a la que Israel atribuye el ataque.
En un discurso en la Ciudad Vieja de Jerusalén, el ministro ultraderechista y colono Bezalel Smotrich defendió que sólo con "una guerra que destruya a Hizbulá, que reocupe el sur del Líbano" mejorará la situación de los habitantes del norte de Israel.
Desde el inicio del intercambio de fuego en la frontera, más de 60,000 israelíes se han visto desplazados a hoteles y otras residencias pagadas por el Estado mientras que, al otro lado, son más de 90,000 los libaneses que han abandonado sus hogares.
Continúa la violencia en la frontera con el Líbano
El intercambio de fuego en la frontera continuó, con la intercepción por parte del Ejército israelí de dos drones de Hizbulá, uno por la mañana y otro por la tarde, cuando se dirigían a territorio israelí, según recogieron distintos comunicados castrenses.
Una corbeta Sa'ar 6 de la Marina israelí interceptó uno de los vehículos aéreos no tripulados sobre aguas israelíes, mientras que a primera hora de la mañana las fuerzas armadas detuvieron otro dron que se dirigía a la Galilea, en el norte del país.
"Esta mañana, se identificaron aproximadamente 20 proyectiles cruzando desde Líbano y cayeron en el cruce de Goma (norte de Israel)", anunció por la tarde el Ejército, que respondió a la andanada "destruyendo" la lanzadera utilizada por los milicianos en el área de Hula, a apenas unos dos kilómetros de la divisoria.
El comunicado militar confirmó también la eliminación de "una célula terrorista de Hizbulá" en la localidad sureña libanesa de Meiss al Jabal, donde el ataque de un dron israelí mató a los milicianos Abbas Mohammed Salami 'Zain al Abidin' y Abbas Fadi Hijazi 'Abbas al Hor', cuyas muertes reivindicó el grupo pro iraní.
Según medios libaneses, un dron israelí atacó el vehículo en Meiss al Jabal en el que viajaban los dos miembros de Hizbulá.
"Además, hace poco las Fuerzas Aéreas atacaron infraestructura terrorista en el área de Kfarhamam desde la que se dispararon proyectiles contra Har Dov", continúa el comunicado de las fuerzas armadas israelíes.
El domingo, como primera respuesta al bombardeo de Majdal Shams, Israel bombardeó a por la mañana siete regiones del Líbano con presencia de Hizbulá de forma simultánea, siendo este el único ataque entendido como una respuesta directa que el Ejército ha comunicado hasta el momento.
La divisoria vive su mayor pico de tensión desde 2006 con un intenso intercambio de fuego desde octubre, que se ha cobrado la vida de al menos 565 personas, la mayoría en el lado libanés y en las filas de Hizbulá, que ha confirmado 352 bajas de milicianos y comandantes, algunas en Siria.
En Israel han muerto 46 personas en el norte (22 militares y 24 civiles, incluidos 12 menores y adolescentes en el ataque de Majdal Shams).