Javier Milei, el ultraliberal que rompió el molde político de Argentina
Milei considera que deben recortarse dramáticamente los gastos del Estado
El más novato de los candidatos a la presidencia argentina irrumpió en la política hace apenas dos años con promesas de transformación tan radicales como su vocabulario. Javier Milei se define como libertario y apuesta a ganar las elecciones del 22 de octubre en primera vuelta. Las encuestas se inclinan más por un ballotage frente al peronista Sergio Massa o a la conservadora Patricia Bullrich.
Javier Milei es el más disruptivo de los candidatos a la presidencia de Argentina. Es economista de formación y es el postulante que menos historia tiene dentro del Estado. Su primer cargo público es su puesto actual como diputado nacional, al que llegó en 2021 tras haber fundado La Libertad Avanza (LLA), un movimiento libertario en temas económicos pero conservador en lo social.
Su ejercicio profesional se había concentrado en el sector privado. Entre otros, prestó sus servicios en las empresas de Eduardo Eurnekián, una de las personas más ricas de Argentina, con intereses en los sectores de energía, aeropuertos, infraestructura y agroindustria.
Antes de ser diputado, Milei se convirtió en una figura pública por su persistente aparición en programas de televisión, en los que expresaba posiciones críticas respecto al manejo de la economía y otros asuntos públicos de manera muy histriónica y con un aspecto más de rockero despeinado que de político tradicional.
Su discurso se centra justamente en cuestionar lo que denomina "la casta", el 'establishment' de la política local. "El modelo de la casta parte de una premisa nefasta, que dice que donde hay una necesidad hay un derecho. El problema es que las necesidades son infinitas y los derechos alguien los tiene que pagar. Eso implica que hay que tener recursos y los recursos son finitos."
Milei considera que deben recortarse dramáticamente los gastos del Estado. Entre sus propuestas se encuentra la de dolarizar la economía, o al menos lanzar una libre competencia de monedas que, dice él, desembocaría en una dolarización, y cerrar el Banco Central.
También prevé privatizar empresas públicas, bajar impuestos y llevar adelante una reforma laboral.
Milei, quien se presenta como libertario, anarco capitalista y, monarquita, también tiene posiciones conservadoras y de derecha. Niega la cifra de 30,000 desaparecidos durante la última dictadura, se opone al aborto legal y quiere que la educación sexual integral deje de ser obligatoria en las escuelas.
Para sus seguidores, el principal activo de Milei es simplemente ser diferente. En un acto del candidato en la localidad de San Martín, en las afueras de Buenos Aires, Elvio, uno de sus votantes asegura a RFI en español que "la seguridad que me da Javier Milei hoy en día, a mí y creo que, a un montón de gente, es que no es político, y todo lo que él dice nace del sentido común."
En las primarias de agosto, La Libertad Avanza sacó el 29.86 % de los votos. El sistema electoral argentino prevé la victoria con la mitad más uno de los votos o con el 40 % y una diferencia de diez puntos con el segundo más votado.
La esperanza de Milei es ganar en primera vuelta este 22 de octubre, el mismo día en que cumplirá 53 años.