Incendios en Grecia: los voluntarios se esmeran para ayudar a las autoridades
Un profesor de informática desarrolló una aplicación para registrar los evacuados
En primer lugar, se da una paradoja en esta gran isla de Grecia: se puede conducir por la carretera costera desde la ciudad de Rodas, en el norte, hasta el pueblo turístico de Lindos sin darse cuenta de que hay incendios en curso. Es entonces cuando las consecuencias se hacen claramente visibles, desde el pueblo costero de Kiotari, donde las llamas han cruzado la carretera desde la zona montañosa hacia la costa.
Unos kilómetros más allá, una columna de humo se eleva cerca del pueblo de Vati, un poco más al interior de la isla de Rodas. Es aquí donde la lucha contra las llamas es hoy una de las más intensas. Frente a las limitaciones y carencias del Estado griego, los voluntarios se remangan con ingenio para hacer frente a esta situación excepcional y dramática.
"Lo de siempre"
Nacido en Bruselas en el seno de una familia originaria de Rodas, Christos Doulkeridis, alcalde de Ixelles, está aquí de vacaciones, como casi todos los años. Ante los incendios y sus consecuencias, subraya la importancia de los voluntarios: "Yo diría que es casi 'lo de siempre': llegas y te enteras de que hay incendios. No es un fenómeno raro, es algo que lleva ocurriendo desde que yo era niño. Y es lo mismo: no hay suficientes aviones especializados, no hay suficientes bomberos, no se hace suficiente trabajo previo. Aquí hay que reconocer que la escala de los incendios es realmente especial, mucho mayor. No podemos abandonar y si dejamos hacer las autoridades, nunca saldremos de esta, pues reaccionamos".
Marios Hatzimihalis, un profesor de informática, desarrolló él solo una aplicación para registrar a los evacuados: "Desarrollé la primera versión de la aplicación el viernes por la noche sólo para nuestro propio centro de alojamiento de emergencia. Pero a las autoridades les gustó el concepto, así que lo adoptaron y lo distribuyeron a todos los centros de acogida de evacuados", explica.
Alojamientos de emergencia
Desde el sábado, un total de más de 600 turistas han pasado por la escuela privada Rodion Paidia de Rodas, convertida en centro de alojamiento de emergencia. "El sábado, las autoridades nos pidieron que abriéramos nuestras instalaciones y atendiéramos a los turistas que tuvieron que evacuar su hotel. En pocas horas, unos 20,000 turistas fueron dirigidos a distintos establecimientos", explica su director general, Kyriakos Kyriakoulis.
"Realmente vimos cómo el fuego se acercaba al hotel. En un momento dado, el personal se marchó. Dieron la alarma. No había órdenes, ni instrucciones, ni un plan. Afortunadamente, conseguimos mantener la calma por los niños y logramos evacuar con todas nuestras pertenencias. Estábamos en un limbo, era un caos. Luego nos encontramos aquí, donde pudimos establecernos. Y, sobre todo, recibimos una acogida realmente excepcional por parte de personas que se pusieron a nuestra disposición, que nos acompañaron, que nos tranquilizaron, que tranquilizaron a los niños. Y eso fue realmente increíblemente valioso", cuenta Vincent, un turista suizo.
En vista de la evolución de los incendios, la escuela no tiene previsto cerrar su centro de acogida de urgencia hasta dentro de unos días.