Vendée Globe: una regata en solitario, sin escalas y sin asistencia
La regata más extrema que une deporte y ciencia
El 10 de noviembre del 2024 zarparon del puerto francés Les Sables d'Olonne 40 veleros de clase IMOCA 60 pies para dar la vuelta al mundo en solitario. La Vendée Globe, con más de 24 millas náuticas por recorrer (unos 45,000 km), es un desafío deportivo, pero también técnico e humano, ya que los navegantes dan la vuelta al mundo solos, sin escalas y sin asistencia. La regata, que tiene lugar cada cuatro años, también ayuda a recabar datos sobre el clima y el océano, gracias a los instrumentos que llevan a bordo los skippers.
La Vendée Globe se llama así pues es una regata a vela que sale de la Vendée, un departamento francés del atlántico, para ser exactos, de la estación balnearia Les Sables d'Olonne, y Globe pues le da la vuelta al mundo cruzando puntos tan legendarios como los cabos de Buena Esperanza en Sudáfrica, Cabo Leeuwin en Australia y Cabo de Hornos en Tierra de Fuego.
Los skippers llevan a cabo esta travesía a bordo de veleros de clase IMOCA, monocascos de 60 pies (18.28 metros de largo), destinados a regatas oceánicas, ya sea en solitario, como la Vendée Globe y la Route du Rhum, o en doble, como la Transat Jacques-Vabre. Están diseñados para enfrentar condiciones adversas de navegación en alta mar.
La mitad de los veleros están equipados con "foils", una especie de apéndices laterales que permiten a los barcos volar por encima del agua y alcanzar velocidades impresionantes.
El récord actual de la prueba lo ostenta desde hace ocho años el francés Armel Le Cléac'h, quien completó la vuelta al mundo en 74 días, 3 horas, 35 minutos y 46 segundos (edición 2016), pero otros competidores pueden tardar más de 150 días en recorrer las 25 mil millas náuticas (unos 45 mil kilómetros). Sin hablar de los que no logran completar la vuelta. Desde 1989, de los 200 intentos de hacer la travesía, sólo 114 navegantes lo han logrado.
Cada cuatro años
Esta regata tiene lugar cada cuatro años, la salida siempre es en noviembre, pero muchos no logran terminar esta vuelta en solitario por las condiciones tan extremas que enfrentan.
La Vendée Globe es también una regata que colabora con la ciencia, varios de los participantes llevan a bordo de sus veleros instrumentos para conocer mejor el océano y el clima.
Y miles de personas, gracias a la tecnología, pueden seguir día con día la trayectoria de los regatistas. Aquí puede seguir el recorrido de los navegantes.
RFI conversó con Didac Costa, skipper español quien participó en la Vendée Globe en el 2016 y en la edición del 2020, que por la pandemia, el público no pudo asistir.
Al servicio de la ciencia
Para esta décima edición, 25 navegantes voluntarios llevan a bordo de los veleros de la clase IMOCA instrumentos científicos proporcionados por la UNESCO como boyas de superficie, estaciones meteorológicas y termosalinógrafos.
Los datos recabados, sobretodo en zonas remotas del planeta, como son los Grandes Mares del Sur, permiten tener un mejor conocimiento sobre el clima y el océano y enriquecen el Sistema Mundial de Observación de los Océanos, The Global Ocean Observing System (GOOS), un programa de la UNESCO. Y de este modo, mejorar los modelos de predicción meteorológica.