Un surtido de candidatos violentos, racistas y antisemitas incomodan a Agrupación Nacional
Jordan Bardella y los desafíos de la campaña ultraderechista
El partido Agrupación Nacional, ganador en la primera vuelta y claro favorito en los sondeos para la segunda este domingo 7 de julio, está en plena operación limpieza en la recta final de las legislativas anticipadas. El líder de la ultraderecha y candidato a primer ministro Jordan Bardella ha estado respondiendo a revelaciones sobre decenas y decenas de candidatos a diputado acusados de actos de violencia y declaraciones racistas y antisemitas.
Resurge una foto y todo explota. Agrupación Nacional retiró este martes de la carrera legislativa a Ludivine Daoudi, su candidata de la ciudad de Caen, en el oeste de Francia. Esto después de que se publicara un selfie de Daoudi usando felizmente una gorra militar nazi.
Este jueves, a dos días de los comicios, ya no se puede descartar a ningún candidato, incluso a los más polémicos como Daniel Grenon, diputado del departamento de Yonne. "Algunos magrebíes ocuparon puestos de ministros. Para mí, esa gente no tiene lugar en las altas esferas", declaró en un audio grabado. El diputado agregó que, aunque tuvieran doble nacionalidad francesa, no aceptaba norafricanos en altos cargos.
Reaccionando en cadena nacional a estas palabras, Jordan Bardella, candidato de la ultraderecha al puesto de primer ministro, respondió que el diputado será convocado por la comisión de conflictos de Agrupación Nacional para intentar excluirlo del partido.
Jean-Yves Le Boulanger, candidato de la región de Bretaña, que además es motociclista, afirmó "no soy racista" porque, durante una bendición motera, "no atropellé al cura de color que bendijo mi moto". Otra política se justificó argumentando que su "oftalmólogo es judío" y su "dentista musulmán".
Monique Becker, de una región fronteriza con España, difundió en redes publicaciones glorificando a Franco y a la Organización del Ejército Secreto (OAS), un grupo terrorista ultranacionalista francés contra la independencia de Argelia.
A esta larga lista de candidatos incómodos, por no decir sancionables, se suman los que tienen un pasado delictivo. Annie Bell, de 78 años, candidata en el departamento de Mayenne, secuestró en los años 90, junto a su esposo, al alcalde de un pueblo, a mano armada y durante tres horas, para reclamarle por la quiebra de su negocio.
La prensa ha solicitado reacciones a Bardella y éste ha reconocido que en sus rangos hay "ovejas negras". Tras la disolución de la Asamblea Nacional, "en 48 horas, tuvimos que seleccionar a 577 candidatos en toda Francia. El 99.9% de ellos son personas que conocemos, respetamos y nos respetan", declaró el favorito de las elecciones.