Se abre el juicio contra unos ultras que preparaban un atentado contra Macron
El líder de la operación y número dos de los "Barjols", Jean-Perre Bouyer, de 66 años, era el encargado de perpetrar el asesinato del jefe del Estado
Trece militantes de ultraderecha pertenecientes a los "Barjols", un grupo armado que en 2018 supuestamente planeó un ataque contra el presidente francés, Emmanuel Macron, se sientan en el banquillo desde este martes en París acusados de terrorismo.
Con más de 5.000 de miembros en Facebook, los "Barjols", nombre dado por los malienses a los legionarios franceses durante las operaciones militares en el Sahel, fue creado en 2017 por Denis Collinet, detenido en marzo de 2020.
Era un grupo con una ideología racista de extrema derecha basada en la conocida como la teoría del gran reemplazo, según la cual la población blanca y europea está siendo desplazada por migrantes, especialmente árabes.
Sus miembros decían prepararse para una guerra civil y racista y, de acuerdo con la acusación, comenzaron poco a poco a planear actos violentos, entre ellos el asesinato de Macron, ataques a mezquitas e incluso un proyecto de golpe de Estado, si bien ninguno llega a producirse.
El objetivo de los trece, que tenían edades comprendidas entre los 26 a los 66 cuando fue desmantelada la organización en 2018, era atacar a Emmanuel Macron durante su recorrido por los antiguos campos de batalla de la Primera Guerra Mundial para celebrar el centenario del armisticio, en noviembre de ese año.
El líder de la operación y número dos de los "Barjols", Jean-Perre Bouyer, de 66 años, era el encargado de perpetrar el asesinato del jefe del Estado -siempre según las conclusiones de la instrucción-, para lo cual tenía intención de utilizar un cuchillo de cerámica como forma para burlar los detectores de metales.
Seis de sus miembros, entre ellos Bouyer, fueron detenidos el 6 de noviembre de 2018, antes de que se produjese el presunto ataque, y cuatro de ellos fueron imputados con cargos de asociación terrorista criminal y de posesión de armas no autorizadas con fines terroristas.
Durante los registros, la policía se incautó varias armas ilegales, entre ellas fusiles, pistolas, y así como de planes de fabricación de explosivos.
Tras cuatro años de investigación, los trece miembros de los Barjols, once hombres y dos mujeres, se enfrentan en el Tribunal Correccional de París hasta el 2 de febrero a delitos que están penados con hasta 10 años de prisión.