Macron se jugará su mayoría parlamentaria contra la izquierda en Francia
La alianza Juntos de Macron y la Nueva Unión Popular Ecológica y Social (Nupes) obtienen cada una alrededor del 25.7 %
La primera vuelta de las elecciones legislativas asestó este domingo un revés al presidente francés, Emmanuel Macron, cuya alianza centrista empató con el frente de izquierdas y podría perder su mayoría absoluta tras el balotaje del 19 de junio.
La alianza Juntos de Macron y la Nueva Unión Popular Ecológica y Social (Nupes) obtienen cada una alrededor del 25.7 %, según datos provisionales del ministerio del Interior, que otorga ya un diputado electo a cada una.
"Es una advertencia muy seria para Macron, son 7 puntos menos que en 2017 y la mayoría [absoluta] no se da por hecho", dijo el politólogo Brice Teinturier en la cadena France 2, para quien los franceses buscaron "reequilibrar" la presidencial.
Los comicios son claves para el mandatario reelecto el 24 de abril y que necesita una mayoría absoluta para poder aplicar sin problemas su programa de corte liberal, como el retraso de la edad de jubilación de 62 a 65 años.
Pero, por primera vez en 25 años, los principales partidos de izquierda -ecologistas, comunistas, socialistas y Francia Insumisa (izquierda radical)- decidieron concurrir en un frente unido, liderado por Jean-Luc Mélenchon.
Para la izquierda, el presidente fue reelegido en abril no por su programa, sino porque los franceses le votaron para evitar la llegada al poder de su rival de extrema derecha Marine Le Pen en virtud del llamado "frente republicano".
"El partido presidencial está derrotado", afirmó este domingo Mélenchon, quien llamó a la movilización en el balotaje "para rechazar definitivamente los funestos proyectos de la mayoría de Macron".
"Mayoría fuerte y clara"
Este veterano político de 70 años, que se quedó a las puertas del balotaje de la presidencial con casi un 22 % de votos, presentó estos comicios como una "tercera vuelta" y busca convertirse en "primer ministro", algo difícil sin mayoría.
El sistema electoral francés vuelve complicado hacer proyecciones claras de los resultados. Los electores deben escoger al diputado de su circunscripción -577 en total-, mediante un sistema mayoritario uninominal a dos vueltas.
Sin embargo, según los institutos de opinión, tras el balotaje del 19 de junio, las fuerzas que apoyan al presidente lograrían entre 255 y 295 escaños, seguidas de la Nupes (150 a 210). La mayoría absoluta se sitúa en 289 diputados.
"Somos la única fuerza política capaz de obtener la mayoría en la Asamblea Nacional (...) tenemos una semana para convencer", aseguró la primera ministra Elisabeth Borne, que pidió una mayoría "fuerte y clara" para el oficialismo.
La movilización es clave para el equilibrio final de fuerzas, máxime cuando los votantes de izquierda radical y de extrema derecha son más proclives a abstenerse. La abstención se situó alrededor del 52 %, según el ministerio del Interior.
Zemmour, eliminado
Tras el balotaje, se conocerá si los franceses otorgan su confianza total a Macron y más de 289 diputados, si lo obligan a negociar con una mayoría relativa o si le imponen una "cohabitación".
Francia ya ha conocido mandatos con un gobierno y un presidente de diferente signo político. La última cohabitación fue de 1997 a 2002, cuando el presidente conservador Jacques Chirac nombró primer ministro al socialista Lionel Jospin.
A diferencia de la presidencial, la ultraderecha -dividida- no llega en posición de fuerza, más allá de sus feudos en el norte y el sureste, y el tradicional partido de derecha Los Republicanos (LR) se juega su porvenir tras la debacle de abril.
Según los sondeos, LR mantendría entre 33 y 80 diputados, por delante de la Agrupación Nacional (RN) de Le Pen que con 10 a 45 escaños tendría posibilidades de formar grupo parlamentario. El ultraderechista Éric Zemmour quedó eliminado.
En caso de una mayoría relativa de Macron, LR se ve como "determinante" para sacar adelante leyes. Su presidente, Christian Jacob, avanzó que en caso de duelos entre Juntos y la Nupes aboga por llamar a no votar por la "extrema izquierda".
El partido de Macron tampoco llamará a votar de forma generalizada por un candidato de la Nupes si se enfrenta a uno de la extrema derecha, sino "caso por caso", ya que "algunos candidatos de la Nupes son extremos".
Aunque el poder adquisitivo, en un contexto de alza de precios por la guerra en Ucrania, es la principal preocupación de los franceses, la campaña estuvo marcada por varias polémicas sobre la actuación de la policía, como el caos vivido durante la final de la Champions en el Stade de France.