Protesta en Colombia: ¿qué se juega Petro con su reforma laboral?
Marchas en Bogotá apoyan reformas de Petro, pero el Congreso las frena

Miles de personas marcharon la víspera en Bogotá y otras ciudades para respaldar las reformas del gobierno, en particular la laboral, hundida en el Congreso mientras avanzaban las manifestaciones, y la de la salud.
La jornada fue convocada por el propio presidente Petro que buscará validar estas reformas por la vía de la consulta popular. La investigadora Angie González explicó a RFI las grandes dificultades que plantea esta vía.
Gustavo Petro llegó al poder en 2022 prometiendo reformar el sistema social colombiano. Tres años después, su reforma laboral fue frenada una primera vez en el Congreso por lo que él denomina un "bloqueo institucional". El proyecto de ley volvió a fracasar en el Congreso este martes.
Motivo del rechazo
Angie González, docente investigadora de la Universidad del Externado en Bogotá y experta en comunicación política, explicó a RFI una de las principales razones que explican el rechazo a la reforma laboral.
"Era una reforma que básicamente lo que quería era tratar de disminuir la jornada laboral para que se pudieran aumentar las horas extra. También incluía aumentar el ingreso por el sueldo. Era una reforma muy pensada para favorecer a los empleados. La mayor crítica que se le hacía, desde distintos sectores, es que era una reforma que no estaba pensada para resolver el gran problema que tiene el país: la informalidad. Esta es la modalidad de trabajo a la cual están vinculadas la mayoría de las personas en Colombia", explica González.
Tras el rechazo en el Congreso, Gustavo Petro quiere someter a consulta popular la reforma laboral, así como la del sistema de salud. Pero para que esta consulta prospere, el gobierno debe superar los 13 millones de votantes. Esta perspectiva parece muy difícil a la investigadora Angie González.
"Para que esa consulta pueda concretarse, se necesita la aprobación previa del Congreso. Esto quiere decir que los mismos parlamentarios que no le votaron la reforma laboral, que probablemente no le votarán tampoco la reforma de la salud, deben aprobar que esa consulta salga a la calle. Ése es un primer obstáculo. El segundo gran obstáculo es que, en caso de que sí saliera la reforma a la calle, el presidente necesitaría una cantidad de votos que supere por un amplio margen la cantidad de votos que él obtuvo en la segunda vuelta. Esa vez fueron casi 11 millones de votos, pero para esta consulta popular el presidente necesitaría unos dos o tres millones de votos más", sostiene González.
Para González, la estrategia de Petro se asemeja más a una campaña de imagen, cuando resta un poco más de un año para los comicios presidenciales a los que el mandatario saliente no puede presentarse.
Para Angie González, experta en comunicación política, el gobierno está tratando de imponer el relato de que "está acorralado", pero también el de "un presidente que, como lo dijo el mismo Petro, cree en el cambio, pero ha tenido un gabinete que no cree en el cambio tanto como él y por eso éste no ha sido posible; un presidente que está tratando de sortear los retos que le imponen las instituciones políticas que, según él, están cooptadas, por ejemplo, el Congreso, el cual está lleno de 'políticos tradicionales', como los llama.
Ése es el relato que se está imponiendo más allá de las reformas", concluye González.