Brasil restringirá la entrada de algunos extranjeros para reducir la migración hacia EEUU y Canadá
La medida, que entra en vigor el lunes, afectará a los migrantes asiáticos que necesitan visas para permanecer en Brasil.
Brasil empezará a imponer restricciones a la entrada de algunos extranjeros procedentes de Asia que busquen refugio en la nación sudamericana como medio para migrar hacia Estados Unidos y Canadá, anunció la oficina de prensa del Ministerio de Justicia el miércoles.
La medida, que entra en vigor el lunes, afectará a los migrantes asiáticos que necesitan visas para permanecer en Brasil.
Una investigación de la Policía Federal ha revelado que estos migrantes a menudo compran vuelos con escala en el aeropuerto internacional de Sao Paulo en camino hacia otros destinos, pero se quedan en Brasil desde donde inician su viaje hacia el norte, de acuerdo con documentos oficiales proporcionados a The Associated Press.
Más del 70 % de las solicitudes de refugio en el aeropuerto son de personas con nacionalidad india, nepalí o vietnamita, según uno de los documentos.
A partir de la próxima semana, los viajeros que no cuenten con un visado tendrán que seguir con su viaje por vía aérea o regresar a su país de origen, señaló el ministerio.
Un reporte firmado por Marinho da Silva Rezende Júnior, investigador de la policía federal, le informa al Ministerio de Justicia que desde el año pasado ha habido "gran agitación" debido al flujo de migrantes en el aeropuerto en Guarulhos, la segunda ciudad más poblada del estado de Sao Paulo.
"La evidencia deja entrever que estos migrantes, en su mayor parte, están utilizando la conocida —y extremadamente peligrosa— ruta que va desde Sao Paulo hasta el estado occidental de Acre, de forma que puedan ingresar a Perú y dirigirse hacia Centroamérica y luego, finalmente, llegar a Estados Unidos a través de su frontera sur", dice uno de los documentos.
Una investigación de la AP en julio halló a migrantes, incluidos algunos de Vietnam y la India, que atravesaban la Amazonía. Muchos regresaron a Acre, en la frontera con Perú, donde se mantuvieron a la expectativa ante las políticas fronterizas aplicadas por Estados Unidos.
El Ministerio de Justicia de Brasil dijo que las nuevas directrices no serán aplicables a los 484 migrantes que se encuentran actualmente en el aeropuerto internacional de Sao Paulo.
Horas antes el miércoles, el Ministerio Público Federal indicó en un comunicado que el aeropuerto internacional de Sao Paulo "registra una vez más un elevado número de extranjeros que arriban en vuelos de la aerolínea LATAM y que no salen rápidamente del país debido a la sobrecarga en el sistema migratorio brasileño".
La dependencia añadió que presionará a las aerolíneas para que proporcionen a los migrantes algunos suministros básicos mientras aguardan a que se les conceda refugio. El término se refiere a la aplicación del estatus de refugiados, sin importar cuál sea la razón.
La aerolínea LATAM no respondió de momento a una solicitud de la AP en busca de comentarios.
"Es importante que tomemos una decisión rápida sobre estas solicitudes de refugiados, de forma que la creciente llegada de extranjeros no genere un impacto sobre la operación del aeropuerto en sí", dijo el procurador general Guilherme Rocha Göpfert después de celebrar una reunión el miércoles en el aeropuerto internacional de Sao Paulo.
Uno de los documentos afirma que la policía federal de Brasil recibió 9,082 solicitudes de refugio este año hasta el 15 de julio. La cifra duplica con creces el total de 2023, y es la más alta en una década, según los datos.
Históricamente, Brasil ha acogido refugiados, particularmente afganos, en los últimos años, sin importar las inclinaciones ideológicas de los gobernantes del país sudamericano.
Pero los reportes de migrantes que solicitan estatus de refugiados como un medio para utilizar a Brasil como punto de partida han generado frustración en el gobierno, especialmente en una época en que el sistema está rebasado ante la llegada de un gran número de personas procedentes de Haití, Siria, Afganistán y Ucrania que solicitan visas por razones humanitarias.
Brasil concedió 11,248 visas humanitarias tan sólo a afganos entre septiembre de 2021 y abril de 2024, según cifras gubernamentales.
En enero de 2023, en los primeros días de su gobierno, el presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva decidió reintegrar al país al Pacto Mundial para una Migración Segura, Ordenada y Regular, un acuerdo intergubernamental.
Su gobierno ha conservado las visas humanitarias, pero ha endurecido las directrices para su concesión.