Inflación en Argentina: Aumenta la gasolina, pero no el sueldo
El Gobierno insiste en que el reciente repunte de los precios es el resultado de una inflación "reprimida" por los acuerdos de precios puestos en marcha por la anterior administración.
Argentina cerró 2023 con una inflación récord del 211%, la más alta en más de 30 años. Solo en diciembre, el costo de la vida se disparó un 25%. Esta escalada de precios se vio alimentada en particular por la subida de los precios de los carburantes, que se han disparado desde el inicio del "shock de austeridad" introducido por el nuevo presidente ultraliberal Javier Milei.
En Buenos Aires, en una gasolinera de YPF, la compañía petrolera nacional del país, por 10,000 pesos, el equivalente a 11 euros al cambio oficial, Adrián carga en su furgoneta unos 15 litros de gasolina. Hace poco más de un mes, con la misma cantidad de dinero, podía comprar 25 litros.
"Me afecta un montón porque, como hago camisas para terceros, con esta camioneta hago la logística, la entrega y el retiro, y cuesta", dice a RFI.
Desde el inicio del shock de austeridad prometido por el nuevo presidente ultraliberal Javier Milei y la devaluación del 118% de la moneda nacional, los precios en el surtidor casi se han duplicado, con un efecto multiplicador en el resto de los precios.
"No comparto las medidas pero hay que adecuarse. El tema es que aumenta la gasolina pero no el sueldo de todos los ciudadanos", protesta.
El Gobierno insiste en que el reciente repunte de los precios es el resultado de una inflación "reprimida" por los acuerdos de precios puestos en marcha por la anterior administración. Para Guillermo, que está llenando el depósito para irse de vacaciones con su familia, la liberalización de precios decidida por Javier Milei era necesaria, aunque podría haber sido más gradual.
"Estábamos viviendo en una mentira que la gente le convenía. Estaban un poco atrasados los precios. Ahora estamos pagando las consecuencias", opina.
A principios de febrero, el fin de una exención temporal de impuestos sobre el carburante podría provocar una nueva subida del 10% en el surtidor.