Terapia de choque y tijera para la Argentina de Javier Milei
Argentina está atada a un programa con el FMI por la deuda de 45,000 millones de dólares
El nuevo gobierno ha presentado un paquete de urgencia para evitar la hiperinflación de Argentina, justo cuando el país registra 160.9% de inflación.
El Ministro de economía de Argentina, Luís Caputo, ha sido el encargado de dar el pistoletazo de salida y anunciar el paquete de medidas de urgencia para paliar la crisis que atraviesa Argentina. "Definitivamente estamos frente a la peor herencia de nuestra historia, un país donde los argentinos somos cada vez más pobres", afirmaba Caputo.
Un paquete que medidas que supone el mayor recorte económico que se recuerda en el país: devaluación de la moneda un 50%, suspensión de obras públicas, reducción de subsidios de energía y transporte, reducción de funcionarios... El presidente Javier Milei fue claro con sus ciudadanos: "No hay plata", y no dudo en advertirles que vendrán tiempos difíciles. Lo hace justo cuando el país se encuentra con un 160.9% de inflación.
"Pienso que el comercio, que es donde yo trabajo, va a recibir el golpe más fuerte. Si ya estuvimos tanto tiempo en crisis, que estemos un tiempito más para poder salir adelante, me parece que aguantamos el golpe", cuenta Tatiana Victor, una vendedora de Buenos Aires, entre risas.
Un paso atrás para coger impulso
Una terapia de choque, según Milei, es un paso atrás para coger impulso con un impacto que afectará especialmente a la clase trabajadora. Ariel Slipak, economista y profesor de la Universidad de Buenos Aires, dijo a RFI: "El gobierno entrante fue muy hábil en tejer un discurso, en donde se le atribuyen los costos de estas medidas a los 100 años de decadencia Argentina. Estas medidas van a generar un importante incremento en el costo de vida para la población Argentina, en general. Tanto al menor ingreso, como la de ingreso medio".
A pesar de la polémica que generan estos ajustes, el Fondo Monetario Internacional ya ha respaldado estas primeras medidas. Un beneplácito que no convence a los expertos por el historial previo que hay entre Argentina y el FMI.
Argentina está atada a un programa con el FMI por la deuda de 45,000 millones de dólares que contrajo en 2018. Antes de abril de 2024, el país está obligado a cancelar 10.000 millones de dólares con organismos internacionales y acreedores privados.
"Es bastante lógico que el Fondo Monetario Internacional reaccione de esta manera, porque en general, son planes de ajuste y megadevaluaciones, incluso en renegociaciones de deudas, que en el caso argentino, no se llevará a cabo", explica Slipak.
No todos son recortes. El nuevo gobierno también ha anunciado que aumentará el monto de ayuda social porque, la crisis irá peor en los próximos meses y la clase obrera será la que más se verá afectada con el aumento – aún más- de precios de los productos básicos y la devaluación de la moneda.
Un inicio de legislatura dura pero, tal y como afirmaba este miércoles el ministro de Economía, el gobierno prefiere "decir una verdad incómoda que una mentira confortable" a los argentinos.