¿Es cierto que no existen dos copos de nieve idénticos?
Es una afirmación popular, pero también tiene una respuesta acreditada ¡Mira!
Alguna vez habrás escuchado, pues se trata de un dicho muy popular, que no hay dos copos de nieve idénticos, ¿no es cierto? Seguramente no solo lo hayas escuchado, sino que lo hayas leído en más de una oportunidad. Pero alguna vez te has preguntado, ¿es esto cierto o se trata de una exageración? pues la respuesta es que si: no existen dos copos iguales.
El que respondió la pregunta fue el químico Jason Benedict, de la Universidad de Buffalo en Nueva York. Benedict es, además, experto en cristales y explicó cuál es el proceso en el que se forman los copos de nieve y los motivos que impiden que haya dos iguales. Pero el propio Benedict hizo una salvedad: puede afirmarse que no hay dos copos iguales en términos de probabilidad y no por sentenciar algo fáctico.
Son muchos los factores que inciden en la forma que toman los cristales de hielo. Su forma final dependerá de la humedad, de la temperatura, de la presión del aire y todas estas variables cambian constantemente a medida que los vientos soplan. Es por esto que la probabilidad de que cada molécula de agua en ese copo de nieve tome exactamente el mismo lugar que otra es extremadamente improbable.
¿Qué son entonces los cristales de nieve?
No son las gotas de lluvia congeladas. Técnicamente, eso sería aguanieve. Pero el cristal de nieve se forma cuando el vapor de agua se convierte directamente en hielo, sin pasar por el estado previo de convertirse en agua líquida. Mientras más vapor de agua se condensa en un cristal de nieve, más patrones ornamentados emergen, ¿increíble, no?