En qué se diferencian la banana y el plátano
¿Son dos alimentos distintos o es el mismo llamado de distintas maneras?
Muchas personas creen que la diferencia entre la banana y el plátano tiene que ver sólo con cómo se le llama, según la región o la cultura de cada país. Sin embargo, esta creencia es errónea y, aunque son similares, tanto la banana como el plátano tienen diferencias, ¿sabías?
Tanto el plátano como la banana pertenecen a la familia de las musáceas, las plantas monocotiledóneas conocidas por sus frutos bananos. Tanto los plátanos como las bananas que comemos habitualmente son una combinación de dos variantes de esta planta: la musa acuminata y la musa balbisiana.
En términos estrictamente nutricionales, las diferencias son las siguientes: el plátano tiene menos hidratos de carbono y, en consecuencia, menos aporte energético. Además, tiene menos almidón y más azúcares, por lo que es bastante más dulce. El plátano también tiene más minerales, aunque su contenido de fibra, proteínas y vitamina C es casi idéntico. El plátano tiene más fósforo y más potasio, pero a su vez tiene menos magnesio y calcio. Por último, el plátano tiene menos sodio.
En cuanto a sus propiedades organolépticas, que son aquellas que describen las características físicas y las que pueden percibir los sentidos, como por ejemplo el sabor, color o textura, hay diferencias notorias. La piel de la banana tiene un color amarillo intenso y una pulpa suave, mientras que la piel de los plátanos generalmente es verde, tornando a un amarillo opaco cuando están muy maduros.
Es más común que el plátano se cocine tanto hervido, como horneado o frito. No porque no se pueda con la banana, pero el plátano conserva su forma durante su cocción y con la banana esto no sucede porque se ablanda demasiado.
En concreto, son bastante similares, pero hay diferencias y no son solo respecto a su nombre. Y a ti, ¿te apetece alguna de estos alimentos para tus comidas?