Cinco claves para ser feliz y disfrutar la cuarentena
A veces dejamos que las situaciones externas nos quiten la felicidad y permitimos que nos invada la ansiedad, el enojo y la preocupación, en tiempos de coronavirus te compartimos cinco claves para que no dejes de ser feliz
Los números de afectados con el coronavirus suben y cada día crece más y más la angustia en nuestro interior quitándonos la felicidad. Pero, ¿qué podemos hacer para ser felices aún en circunstancias no tan favorables?
Generalmente cuando perdemos nuestra felicidad ante situaciones como las actuales es porque no aceptamos nuestra circunstancia, contexto y realidad. Muchos especialistas en felicidad como Sylvia Ramírez consideran que una persona es feliz cuando “su disposición para la vida implica estar contento con las cosas que actualmente funcionan. Quien asume con serenidad los desafíos de la cotidianidad, sin resignarse, pero sin afanarse”.
La coach de vida, Jenny Colón ve la felicidad como “la dicha del ser, hacer, tener y vivir desde la esencia de nuestro ser: el amor”, tomando en cuenta que este estado lo genera la plenitud de vivir desde adentro hacia afuera en cada detalle dela vida.
Por eso, hemos llegado a la conclusión de que la felicidad es integra, personal y es el resultado de un trabajo diario que se logra con las decisiones que tomamos. Tomando como guía que cada quien lo único que busca en la vida es ser feliz, te compartimos algunas claves para que te decidas a lograrlo.
1. Decide ser feliz
Como hemos mencionado anteriormente la felicidad se logra con decisiones, entonces, primero decide ser feliz, cuando hayas tomado esta iniciativa todas las otras decisiones que tomes en tu vida serán enfocadas en esta primera.
Nadie tiene el control de tu vida, nadie puede quitarte tu paz, tú eres quien decide que aceptas y que no y sobre todo lo que esto te hace sentir.
Jenny Colón considera que es necesario “crear nuestra propia definición de felicidad e incurrir cuestionamientos como: ¿soy feliz? ¿Siento merecimiento de felicidad? y ¿qué valores sostienen mi felicidad?”
La felicidad no llegará a tu vida cuando vuelvas al trabajo, o cuando pase la pandemia del coronavirus, ni cuando los niños vuelvan a la escuela, la felicidad debe ser ahora con la realidad que tienes y en el contexto en el que estas guiada por esos valores que sostienen tu vida.
2. Haz lo que te apasiona sin aférrate al estatus
El trabajo, el dinero, el carro, la universidad, el estatus... nada de esto debe de ser tu foco de felicidad. El éxito y todo lo que conlleva fue creado por la sociedad para exigirte algo que no necesariamente te hará feliz. Pero: ¿qué seríamos nosotros, si todo eso desaparece? Más o menos como ahora.
Tener éxito no está mal, ¡excelente si quieres supérate y ser exitoso en la vida! El problema está en atar tu felicidad a eso porque son cuestiones efímeras que con una pandemia, por ejemplo, se pueden ir al olvido.
Hacer lo que nos gusta es ser feliz. “hacer lo que nos gusta y a lo que no nos gusta inyectarle también nuestra decisión de ser feliz es un gen transformador de nuestros días” así lo considera la también psicóloga laboral. Si estamos en casa accionar caritativamente, nos hace sentir útiles. Verifiquemos cuales son nuestras habilidades y rediseñemos nuestro pensamiento (seamos útiles para nuestra familia, para nuestro país y para el mundo), y con ello estaremos magnificando nuestra intención de ser más feliz.
3. Sé y rodéate de gente positiva
La felicidad es como el coronavirus, si estas junto con alguien infectado es casi seguro que te contagies.
Un estudio realizado por BMJ Group sostiene que la felicidad de la gente, depende en gran medida, de la felicidad de las personas con quién se conecta, pudiendo ser inclusive, un fenómeno colectivo.
Pero es bueno tener presente que todo no se trata de ti, también siendo feliz tú haces feliz a quienes están a tu alrededor. No esperes que los demás te brinden una sonrisa o sean positivos, se tú lo que quieres ver en el mundo.
“Rediseñarnos comienza siempre desde dentro hacia afuera, por lo que nuestros pensamientos son de impacto a nuestra genética y nuestras palabras son una traducción de nuestro subconsciente, que a su vez, nos escucha y se conforman en acciones”, explica Colón.
4. Vive el hoy
Muchos se han preguntado ¿Cómo fue que todo esto sucedió en solo tres meses? Asumiendo que el 2020 ha iniciado con muchas cosas. Un estudio publicado en Sciencemag , afirma que las personas pasan divagando un 47% de su tiempo, esto quiere decir, que la gente no vive en el presente y que las decisiones que toman están basadas en el futuro o en el pasado.
Esto crea ansiedad y frustración porque la gente deja de hacer lo que lo hace feliz y comienza a fantasear o preocuparse por cosas que ni siquiera han ocurrido. Al final estas acciones terminan en arrepentimiento por no hacer lo que quiso cuando pudo.
La autora del libro “Espacios Vitales: una mirada holística para una vida en armonía” entiende que vivir el presente incrementa nuestra conciencia espiritual y nos permite conectar con la realidad individual y colectiva.
“Nos lleva a priorizar nuestros fundamentos y ponderar nuestros hábitos para ser feliz, enfocarnos en lo esencialmente importante. Aprovechar el tiempo aquí y ahora” agregó.
Vivamos el hoy, hoy en casa, hoy con tu familia, hoy con tus hijos, hoy disfrutando ese espacio que es tuyo, vivamos el hoy que tienes salud, el hoy mientras te tomas un café en pijamas, hoy que no hay tanto ruido en la calle y puedes mirar por la ventana y sentir el aire más fresco, hoy que puedes trabajar en tu horario, todo lo que puedes disfrutar hoy no lo arruines por un mañana incierto.
5. Agradece
Exigimos mucho, cuestionamos mucho, pero ¿cuánto agradecemos? Es importante cada día reconocer los privilegios que tenemos. Aunque no lo creas todos somos afortunados porque tenemos oportunidades que otros no tienen.
“Al hacer consciencia de los privilegios que disfrutamos en nuestro presente y con todo lo existente que ha sido creado, se siembra un valor en nuestro ser (el agradecimiento) que nos permite experimentar el amor, dado y recibido a través de las personas, las cosas que tenemos y de nosotros mismos, lo que hace reconocimiento de la abundancia en nuestra vida”, explica Colón.
Es decir, si tienes una casa, una familia, una amiga, cualquier cosa, agradece cada día por ello, porque eres afortunado. Es importante sacar un espacio de tu tiempo y reconocer eso que agrega valor a tu vida y agradecer a Dios o al universo.