Chavón La Escuela de Diseño al ritmo de los nuevos tiempos
La escuela da continuidad a sus programas de estudios, en modalidad virtual
La vida sigue su curso y se vuelve cada vez más exigente; y en su tren solo accede el que alcance la velocidad y la capacidad para llevarla a la altura. Con la pandemia del COVID-19 para muchos significó el fin, para otros una nueva forma de hacer las cosas. Tal es el caso de Chavón la Escuela de Diseño que, sin dejar su mirada hacia la excelencia, ha encontrado la forma de entregarla más enriquecida y sus frutos se pueden visualizar en los trabajos del cuerpo estudiantil; y los de sus egresados.
Una representación de los encargados de departamentos nos relata cómo ha sido el interesante proceso que ha permitido un transitar victorioso en el área de la formación.
“La pandemia nos agarró de manera imprevista”, dice Elías Roedán, director de primer año; y explica que antes de COVID-19 la escuela llevaba el control de notas y tareas a nivel virtual, pero que el proceso y la estrategia educativa aún estaban diseñadas para la modalidad presencial. “Estos nos agarró de sorpresa, pero gracias a Dios la parte administrativa, docentes y estudiantes pusimos de nuestra parte, logrando tomar el ritmo a la velocidad de un relámpago; tan solo en una semana se activó la plataforma de ZOOM, se entrenaron a los profesores para la plataforma del Classroom, que permite al estudiante revisitar la clase cuantas veces lo necesite porque quedan documentadas ... fue impresionante cómo se reestructuró todo”.
Dice que conocer a los estudiantes fue una de las fortalezas con las que contaron los docentes en ese momento retador y crucial para salvar el semestre, sin perder la calidad a la que la escuela está acostumbrada a dar. “Juntos trabajamos para ajustar las fallas de una semana y dar continuidad a los aspectos que identificábamos que fortalecían el proceso”, explica Roedán.
Todo esto permitió que entraran con mayor fluidez al trimestre de verano y más intenso en el de otoño.
Cine, una oportunidad para aumentar la creatividad
Por su naturaleza, el cine es un arte que amerita un mayor trabajo en equipo; de manera que fue una de las carreras más retadoras a la hora de adaptarla a la nueva realidad. Para resolverlo hubo que echar mano de la creatividad, que es tan importante en este oficio, dice Tanya Valette, directora la carrera de Cine. Hubo que apretar por un lado y fluir por el otro para alcanzar el equilibrio, sin sacrificar el exigente resultado que caracteriza a la escuela.
“Creo que el compromiso, la responsabilidad, la confianza y el amor por lo que hacemos están siendo elementos han sido vitales para mantener el sello que le ha dado prestigio a la escuela”, dice.
Ella, al igual que Elías, confiesan que llegaron a temer que la modalidad puramente virtual fuera una barrera para la complicidad entre estudiantes y docentes, que es parte del espíritu “chavonero”. Pero no fue así. La virtualidad es una realidad llena de emociones y sentimientos con la que se pueden alcanzar todas las cosas, incluyendo la intensidad y fortaleza de carreras tan demandantes como las de arte.
Esta situación permitió a los estudiantes darse cuenta que no se necesita de tanto para contar una historia. En su espacio íntimo pueden lograr piezas extraordinarias, pero también que partiendo del mundo interior pueden encontrar su voz sin pensar en el afuera, comenta Valette.
La oportunidad de formar artistas de forma diferente
Trabajo de Rita Galmés, estudiante de Bellas Artes 2020.
Raquel Paiewonsky, Coordinadora Carrera de Bellas Artes entró a Chavón en septiembre, período en el que además de comenzar un trimestre totalmente virtual, y que para ella tenía el reto añadido de replantearse el programa completo y con profesores nuevos. “Por suerte la plataforma que estamos usando son prácticas y eficientes que nos brindan posibilidades que jamás nos imaginamos, como la intimidad al trabajar, mayor estructuración de los programas por clase que servirá para el futuro, ya que facilita la interacción y que los profesores puedan dar un seguimiento integral respecto al rendimiento de los estudiantes”.
Entiende que una de las cosas que se han mantenido sin alteración es la educación personalizada que caracteriza a Chavón. Los estudiantes de Bellas Artes requieren una retroalimentación más intensa, de manera que una vez a la semana ella se reúne individualmente, manteniendo la virtualidad, para ver todas las obras en proceso, responder dudas, hablar de preocupaciones para que escuchen su propia voz como artistas... “eso nos ha ayudado a echar para adelante”. Pero es algo que se da en todas las carreras de la entidad – interviene Elías, ante el comentario de Raquel- “Cuando recibo a todos los estudiantes, les hago hincapié en que están entrando a una institución en la que tienen un nombre, un apellido y una historia... los números y matrículas para los asuntos oficiales, pero crear el vínculo que los hace parte de Chavón es parte del proceso de enseñanza-aprendizaje”.
La oportunidad de formar artistas de forma diferente
La pandemia ha dejado bien claro que el mundo es pequeño, que el conocimiento es grande y todos estamos a un click de distancia, lo cual aventaja a entidades de visión universal como Chavón, ya que esta modalidad permite que contar con profesores internacionales que quizá presencialmente les era imposible dar una docencia en República Dominicana y con las nuevas herramientas digitales de la enseñanza, la distancia física no figura como una limitante.
Como ejemplo, Elías Roedán menciona que en el departamento de ilustración cuentan con dos docentes internacionales; el de diseño de interiores tres... que antes ameritaban una logística que ya no es necesaria. En el caso de la facultad de cine el 95% de los profesores son internacionales desde antes de la crisis sanitaria por lo que no han tenido cambios al respecto.
La escuela tiene estudiantes muy diferentes, en cuanto a nivel socioeconómico y cultural se refiere, siendo el común denominador el compromiso y sed por el conocimiento; dos aliados ideales que junto al trabajo en equipo de la escuela permitieran que las metas fueran alcanzadas y aplicadas a través del balance entre el rigor y la empatía al llevar a cabo los programas de estudios.
“Son jóvenes que llegan de diversos países, colegios y estatus sociales. Todos se juntan en Chavón y comparten su pasión por el arte, el diseño o el cine y nosotros bajo la fundación, sabiendo lo difícil que es para muchos padres la situación de la pandemia, somos de las pocas instituciones que ha modificado la matrícula, tenemos un fondo de becas que se ha mantenido para que esos jóvenes tengan acceso a la educación sin importar las circunstancias ... esa es la esencia de Chavón”, dice María Elena Moré, directora ejecutiva de Chavón.
Ventajas que han traído este nuevo formato
Para Ian Victor, coordinador de la carrera Diseño de Comunicación, se ha dado todo para mantener la excelencia a través de las herramientas virtuales. “Se han integrado nuevas mecánicas, recursos y herramientas para que la experiencia Chavonera sea lo más cercano posible a la experiencia presencial”.
Considera que el factor de mayor impacto para migrar las clases de la carrera hacia la virtualidad es el tiempo en clases y como este es utilizado para realizar ciertas dinámicas. Con la ayuda de nuevas herramientas que han incorporado hay muy poco que no se pueda hacer.
Respecto a las ventajas que ha percibido dice que “ve a los estudiantes más enfocados. “Esto ha exigido del docente un nivel de organización mayor y se han desarrollados nuevas recursos para llevar a cabo las enseñanzas que ahora parecieran indispensables. Cosas sencillas como compartir pantallas y realizar correcciones hasta conectar con invitados en otros países con gran facilidad”.
Entiende que será difícil retornar al viejo formato, ya que contempla un futuro donde conviva lo digital y lo presencial, cada uno tiene sus ventajas y creo que harán nuestros encuentros más especiales y se aprovecharan estas nuevas herramientas al máximo.
“La gran ventaja de esta nueva experiencia es que la escuela está más conectada que nunca y hemos creado una comunidad virtual donde los estudiantes en general son bienvenidos a las actividades de las otras carreras como el Cine Club, los Domingos de Música, las charlas, el Club de Cocina... también hemos podido incluir a un elenco de invitados que antes estaban muy ocupados para viajar hasta República Dominicana o participar en los distintos programas”, dice Laura Sánchez, Directora del Departamento de Moda.
En tanto que, para Sahira Fontana, de Fotografía, cada alumno tiene el peso de nuevos tiempos y es responsable de ocuparse por aprender, hemos visto crecer los frutos. Para ellos este nuevo formado le ha beneficiado a través de la optimización del tiempo, contenidos más organizados, disponibilidad de profesores internacionales... “Es un privilegio impartir y recibir clases en la comodidad del hogar. Algunos contenidos más teóricos pueden continuar remotos. La apertura global del aula, recibir invitados de distintos lugares y culturas es más fácil de lo que imaginábamos”.
“Como coordinador de la carrera de ilustración, puedo decir que estoy extremadamente orgulloso del equipo de profesores quienes se han presentado a una situación muy difícil, y lo han hecho con valentía y una constante buena actitud, pero también nuestro personal administrativo ha sido increíble... nadie se rinde. Nadie, especialmente los estudiantes, quienes hicieron todo esto posible por su hambre de aprender y echar hacia delante”, comenta Jonathan Schmidt.
Para él este formato trae oportunidades que son positivas para el medio ambiente ya que en teoría no es necesario tanto tránsito. Además, la ventaja de aula virtual para el futuro de la escuela es que se puedan tener clases presenciales para temas que sí requieren presencia, pero a la vez, clases que no la necesitan nos abre las puertas para tener estudiantes que sencillamente no pueden estar, ya sea por razones de salud o que vivan fuera de Santo Domingo o República Dominicana.