Empresarios hablan de pacto comercial, alianzas, inversión limpia y trabajo justo
Secretario general iberoamericano aboga por rechazar la corrupción y el monopolio
Santo Domingo acoge a representantes de 22 países en XIV Encuentro Empresarial Iberoamericano
Los cambios acelerados y constantes experimentados en los últimos años, y los sucesos imprevistos, como la pandemia y la guerra entre Rusia y Ucrania, han provocado la urgente necesidad de asumir un pacto para lograr un incremento en el comercio interregional, así como para desarrollar cadenas de suministros más resilientes y fluidas, advirtió ayer la vicepresidenta Raquel Peña.
La funcionaria aprovechó para hacer la observación mientras pronunciaba las palabras inaugurales del XIV Encuentro Empresarial Iberoamericano, en el que participan hasta hoy unos 1,500 personas de 22 países, en el marco de la Cumbre Iberoamericana de Jefes y Jefas de Estado y de Gobierno.
“Asimismo -agregó-, es importante evaluar necesarias modificaciones en las estructuras financieras internacionales, que nos permitan enfrentar las obligaciones financieras asumidas por los gobiernos y el sector privado para la recuperación pospandemia, así como para la transición energética y acometer las nuevas y viejas desigualdades que aquejan a nuestros países”.
Invertir en América Latina
En el encuentro, el secretario general iberoamericano, el chileno Andrés Allamand, instó a los empresarios a invertir en América Latina para reimpulsarla, pero observó que debe ser “limpia”.
“Necesitamos empresarios comprometidos con la legitimidad de la economía limpia, esto significa rechazar todo tipo de corrupción, todo tipo de monopolio, todo tipo de intención de aprovecharse de privilegios”, dijo.
Allamand citó que el crecimiento de Iberoamérica debe ser inclusivo, viable socialmente y sustentable con el medioambiente. Y que se debe fomentar la política de género dentro de las empresas, puesto que, los estudios han determinado que quienes incorporan mujeres tienen mejores resultados, no solo desde el punto de vista laboral, sino también productivo.
Indicó que todavía la brecha está lejos de la igualdad en las corporaciones: en América Latina, solo el 10.4 % ocupa cargos directivos, cuando el promedio a nivel mundial es de 20 %.
Otro punto que tocó Allamand es el compromiso empresarial, con la inversión, con el bien común, sus trabajadores y los fiscales con los Estados. Además crear ambientes laborales basados en el mérito.
“Los empresarios deben procurar el bien común con sus trabajadores, pagarles salarios máximos y no mínimos, crear buenos ambientes laborables, no discriminar a sus proveedores y combinar los beneficios del medioambiente con sus consumidores”.
Más acuerdos
En el XIV Encuentro Empresarial Iberoamericano también se ha hecho un llamado al fomento de las alianzas público-privadas y a la unión, para enfrentar las adversidades. Esto lo favoreció Antonio Garamendi, presidente de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales y al frente de la Secretaría Permanente del Consejo de Empresarios Iberoamericanos.
“Invitamos a las empresas a colocar a las personas en el centro de nuestras decisiones, apostando por la educación y sostenibilidad, para impulsar a la industria y, con ello, lograr el desarrollo social de nuestros pueblos”, afirmó.
Celzo Juan Marranzini, presidente del Consejo Nacional de la Empresa Privada (Conep), expresó en el encuentro que se debe forjar una región más prospera y sostenible, y criticó las corrientes populistas que atentan contra el estado de derecho en la región.
Habló sobre la importancia de las transformaciones que las empresas han logrado con la cuarta revolución industrial y mencionó aspectos como la robótica, la inteligencia artificial, la biotecnología y el internet de las cosas. Los debates y análisis durante el evento, que culmina hoy, serán resumidos en conclusiones que se llevarán a la Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno.