Halloween este año

Los que no nacimos hace poco no recordamos haber celebrado Halloween cuando éramos niños. Vivíamos en una sociedad más cerrada, convencional, donde las festividades religiosas eran dominantes, no se cambiaban de fecha para evitar "puentes" y eran compartidas por familiares y amigos.

Hoy en día Halloween, antes desconocido, figura en fiestas, promociones, decoraciones y ventas de productos, aunque hay que señalar que su alcance está limitado a los mayores centros urbanos, las zonas turísticas y la clase media superior.

Hay quienes deploran ese fenómeno como el resultado de una penetración cultural estadounidense, opuesta a nuestros valores tradicionales, y algunos ven en su celebración la insidiosa presencia de cultos satánicos empeñados en reclutar almas jóvenes para sus oscuros propósitos.

Para los economistas es algo más simple: una ocasión más para hacer negocios. Y en el caso de la RD es en parte consecuencia de la emigración de dominicanos que se han integrado en la economía estadounidense, adquirido sus costumbres y hecho de las remesas uno de nuestros principales renglones de entrada de divisas.

Halloween rivaliza con las fiestas navideñas por el primer lugar en las ventas de varios tipos de productos en los EE.UU. Más importante aún, se le toma como un anticipo de cómo serán las ventas en el llamado "viernes negro" un mes después y en la temporada de Navidad. Los pronósticos para este año en base a las intenciones de gasto de los consumidores son que las ventas de Halloween llegarán a unos US$7,400 millones, frente a US$8,600 millones en el 2012.

Y no faltan los engaños. Un análisis de páginas de internet muestra un incremento del 6% en las ofertas de muñecas vudú, encantamientos, pociones amorosas, predicciones del futuro, contactos con el más allá, y hasta aparatos detectores de manifestaciones síquicas paranormales, como los usados en algunas series de televisión.

Gustavo Volmar