Dominicano diseña una máquina para reforestar

Preocupado por el medio ambiente, Don Antonio Ramírez ha diseñado una maquina robótica que tiene la capacidad de sembrar árboles en zonas desérticas y la misma puede ser manejada a distancia a través de un control remoto o vía satélite, sin la necesidad de que un ser humano esté operándola.

“Esta máquina tiene cuatro funciones esenciales: ella taladra el suelo, hace un hoyo y lo llena con tierra semilíquida y siembra plántulas en el hueco; tiene autonomía”, expresó Don Antonio.

Agregó que la máquina está diseñada para trabajar en zonas desérticas y para la reforestación del planeta. Asegura que tiene la capacidad de sembrar entre 240 a 288 árboles en 24 horas sin interrupción porque la misma trabaja con su propia energía: eólica y solar.

Dijo que hay que hacer conciencia y saber que hay que reforestar el planeta. “Se necesita restaurar la vegetación sobre el planeta. Esto entra dentro de un proyecto que se llama Visión Capa Verde. Que es la misión de reforestar el planeta en las zonas desérticas del mundo”.

Aseguró que en el mundo existe la tecnología para reforestar el planeta. “El ser humano ha avanzado tanto en tecnología que lo único que se necesita es voluntad para que se tome esto en serio”.

Para Don Antonio Ramírez su mayor satisfacción sería que algún inversionista se interesara por ella y pueda comenzar a crearla y que otras personas puedan replicar este robot y el mismo sea utilizado para reforestar el planeta. “Con esto yo no busco dinero, sino que alguien se interese por ella y que se pueda construir. Yo entrego esto con todo y papeles porque mi mayor satisfacción sería que sea utilizada para reforestar el planeta”.

Don Antonio, quien es publicista, advirtió que el calentamiento global en parte es natural, pero en otra parte es cuando el hombre agrede la naturaleza.

Este hombre que posee una capacidad de crear y escribir, también, cuenta con un plan de administración hidrológica, que a través del cual se busca que el agua de los ríos no se pierda en el mar, sino que la misma sea aprovechada para las diferentes actividades humanas y económicas.

“Si las autoridades competentes escuchan lo que estoy planteando, de que se trata este proyecto resolveríamos el problema del agua en gran medida. Aquí toda el agua se pierde, se va al mar y con este proyecto podemos resolver el problema”, enfatizó el también escritor.

Joaquín Caraballo

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Graduado en comunicación social en la Universidad O&M. Cursó un Máster en Comercio Internacional en el Centro Europeo de Postgrado CEUPE, tiene varios diplomados en economía, aduanas, sector eléctrico, impuestos y periodismo de investigación.