Próxima temporada
Alrededor de nueve tormentas serán huracanes
Como hemos estado disfrutando de temperaturas agradables, el calentamiento global nos parece ser una amenaza remota. En efecto, en la India y otras zonas del planeta las altas temperaturas han trastornado las condiciones de vida e infligido serios perjuicios a sus economías. Que nos hayamos olvidado de él durante un tiempo no significa, sin embargo, que hayan desaparecido los peligros derivados de su presencia. De hecho, entre sus efectos está el deshielo de las regiones polares, los glaciares, y la nieve sobre las montañas más elevadas, que combinado con variaciones en las corrientes atmosféricas provocan inviernos más fríos en diversas demarcaciones geográficas.
El pronóstico para la temporada ciclónica de este año ha venido cambiando a medida que nos acercamos a ella. En ese sentido, la probabilidad de que su intensidad sea mayor que el promedio de los últimos 20 años ha estado incrementándose. Los más recientes estimados señalan que estará por encima del promedio debido a la persistencia del proceso conocido como “la niña”, el cual debilita los flujos de vientos que desorganizan la estructura de los ciclones. Se anticipa que alrededor de 20 tormentas tropicales recibirán nombres propios, de las que nueve serán huracanes y cuatro de ellos de categoría tres o superior a tres. Pero el calentamiento atmosférico no incide únicamente sobre la intensidad de los ciclones sino también sobre su trayectoria, y esta última consecuencia es más compleja y complicada de predecir.
Ya afectada por las alzas en el precio de los alimentos y combustibles, nuestra economía sufriría un importante daño si uno de esos ciclones decidiera hacernos una visita. Éste es el momento de revisar edificaciones, redes eléctricas, circuitos de telecomunicación, drenajes pluviales, muros de contención de aguas, coberturas de seguros catastróficos, habilitación de refugios, sistemas de respaldo informático y demás recursos y procedimientos pertinentes.