Rosa Elcarte: “Esos niños criados violentamente, acaban educando violentamente”
Hay mayor disciplina violenta en los hogares para con niños de 3 a 4 años, midió una encuesta
La disciplina violenta aplicada en los hogares dominicanos tiende a aumentar entre los niños de 3 y 4 años de edad, y es el principal mecanismo de cualquier método violento, seguido de castigo físico y de agresión sicológica.
“No es el adolescente el que te desespera”, observó la representante residente del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), Rosa Elcarte, al referirse a las cifras que arrojó la Encuesta Nacional de Hogares de Propósitos Múltiples con Metodología de Encuestas de Indicadores Múltiples por Conglomerado (Enhogar-MICS 2019).
La encuesta, realizada a una muestra efectiva de 31,488, midió que el 9 % de las madres o personas cuidadoras encuestadas consideraban el castigo físico como necesario para criar o educar a los niños. El porcentaje difiere de las acciones disciplinarias empleadas en el hogar.
Entre las variables del contexto de las personas encuestadas las diferencias más significativas son las del nivel educativo y las del quintil de riqueza.
“Las madres o personas cuidadoras que no han alcanzado ningún nivel educativo (15 %), son quienes en mayor proporción manifestaron que el castigo físico es necesario. Asímismo, quienes viven en hogares más pobres (13 %) consideran el castigo físico como necesario para criar o educar a los niños”, dice el resumen ejecutivo de la encuesta.
“Creo que, por lo menos, todos queremos para nuestros hijos algo mejor que lo que tuvimos”, dijo Elcarte para refutar la opinión de muchos dominicanos que apoyan la disciplina violenta. “Si analizamos la sociedad en su conjunto, veamos cuánta violencia intrafamiliar hay contra la mujer; cómo esos niños criados violentamente, cuando luego forman una familia, acaban educando violentamente; cuántas mujeres son asesinadas... y la violencia en la calle”.
Durante el segmento Diálogo Libre de este periódico, la directora de la Oficina Nacional de Estadísticas (ONE), Miosotis Rivas, observó, además, que hay un aspecto cultural sobre cómo se concibe el tema de la autoridad.
“Si queremos realmente una sociedad no violenta contra las mujeres, no violenta contra los niños, tenemos que empezar por la casa”, dijo Elcarte.