Silverio Peguero, el técnico que dio los primeros pasos al medallista olímpico Cristian Pinales
El romanense es uno de cuatro entrenadores que formaron a futuros medallistas olímpicos
Solamente en República Dominicana, cuatro entrenadores pueden darse el lujo de afirmar que han sido los formadores de medallistas olímpicos.
Nos referimos al entrenador base y en el caso de César Pinales el honor corresponde a Silverio Peguero De Aza.
Pinales, dueño de una medalla de bronce en los pasados Juegos Olímpicos de París 2024, surgió en la academia de boxeo que lleva el nombre de su entonces entrenador y funciona en el complejo deportivo de La Romana.
La combinación entre Pinales y Peguero de Aza fue un proceso.
Su madre, Eridania Pinales "citó" al entrenador. Había razones, Pinales era muy inquieto y además la madre no quería ese deporte para su hijo.
Fue un gran compromiso, pues Peguero (24 años como técnico), además de entrenador, vigilaba incluso la ingesta alimenticia del niño peleador, al extremo de presentarse al mediodía en la casa de Villa San Carlos y sugerir a la madre que no le diera más comida de la necesaria. "La idea era cuidar el peso", dijo Peguero.
Esos pasos, entre otros, como luchar porque se concentrara más en el boxeo, fue pilar para que hoy se convierta en uno de los formadores de un medallista olímpico.
"El sueño de todos los entrenadores, al igual que el sueño de los deportistas es ser campeón olímpico y campeones mundiales, también es un sueño y un logro de un entrenador lograr tener un alumno campeón olímpico o un medallista olímpico", dijo Peguero.
Pinales ganó bronce en los Juegos de París, al igual que su compatriota Yunior Alcántara para junto a Pedro Julio Nolasco (bronce; Los Angeles 1984) y Félix Díaz (oro; Pekín 2008) convertirse en la cuarteta de medallístas olímpicos del país.
"Eso es lo máximo que existe en el mundo. Y agradezco a Dios y al trabajo que hacemos", continúa sobre tener un medallista olímpico.
Peguero es formador de varios campeones nacionales, quizás sin recibir el crédito que merece.
"Nosotros somos pocos valorados porque no se menciona el entrenador para nada y ni siquiera se remunera, pero estamos trabajando y esperamos que como él aparezcan muchos más", señaló Peguero.
Su salario es de 15 mil pesos mensuales y en su "passola" recorre, a propia cuenta, distintos barrios en busca de nuevos púgiles para el programa.