Scottie Scheffler está imparable: gana otro saco verde del Masters
Jugó de manera extraordinaria en los últimos nueve hoyos de la competencia
Scottie Scheffler no tuvo dudas en este Masters, nadie que lo vio las tenía. Se adelantó con magníficos tiros el domingo y lo hizo a lo largo de los últimos nueve hoyos en Augusta National para una tarjeta de 68 golpes, cuatro bajo par, ganando su segundo saco verde en tres años.
Scheffler está imparable, y contó con la ayuda de sus contendientes para que pareciera más fácil de lo que fue.
Ganó por tres golpes en 2022 con un putt de cuatro en el hoyo final. Esta vez ganó por cuatro, lo que le permitió una cuesta arriba más agradable hacia el green del hoyo 18.
"Tenía muchos jugadores realmente talentosos tratando de alcanzarme, y sabía que con pares no lo iban a lograr", dijo Scheffler.
Después de abrazar al caddie Ted Scott y Collin Morikawa, Scheffler giró hacia la multitud con ambos brazos levantados y gritó, cerrando el puño.
El sueco Ludvig Aberg, novato en el Masters, le planteó su desafío más difícil, perdiendo terreno tras quedar cerca del agua en el hoyo 11 por un doble bogey. Contra un jugador como Scheffler, esos errores no son fáciles de superar.
Aberg cerró con ronda de 69 y fue el subcampeón.
Morikawa, quien tuvo dos dobles bogeys para quedar fuera de la contienda, tiró 74 y empató en el tercer lugar con Tommy Fleetwood (69) y Max Homa (73), cuyas esperanzas terminaron en el par 3 del hoyo 12 con un doble bogey.
"Él es bastante bueno dejando atrás cosas que le preocupan, dando un paso adelante con tiros realmente difíciles haciéndolos y suyos", dijo Homa sobre Scheffler. "Obviamente es un talento tremendo, pero también su superpoder".
Scheffler, de 27 años, es el cuarto jugador más joven en tener dos chaquetas verdes, alargando su ventaja en el No. 1 del mundo a niveles no vistos desde el apogeo de Tiger Woods. Scheffler ahora tiene tres victorias en los campos más fuertes (Bay Hill, The Players Championship y Masters) en sus últimos cuatro torneos . El otro fue un segundo puesto en Houston.
Su esposa, Meredith tuvo que verlo desde su casa en Dallas, donde espera el nacimiento de su primer hijo para finales de mes.
"Es un momento muy especial para mi y mi esposa. No puedo expresar con palabras lo que significa volver a ganar este torneo. Realmente no puedo expresar con palabras cómo será ser padre por primera vez. Tengo muchas ganas de llegar a casa y celebrar con Meredith" dijo Scheffler.
"Ha sido una semana larga aquí sin ella, pero estoy deseando llegar a casa".
Woods cerró con una tarjeta de 77 golpes y terminó con 16 para 304, la mayor cantidad de 72 hoyos de su carrera.
Scheffler terminó con 277 golpes, 11 bajo par, y ganó 3,6 millones de dólares de la bolsa de 20 millones.
Podría resultar desalentador para sus competidores que Scheffler ahora tenga 10 victorias a lo largo del mundo, que datan de su primer título del PGA Tour en el Abierto de Phoenix hace solo dos años y dos meses.
Durante ese tramo, Scheffler ha terminado entre los 10 primeros un 65% de las veces.
Cuatro jugadores compartieron el liderato en varios puntos a lo largo de los primeros nueve hoyos.
"Sentí que luché toda la semana", dijo Scheffler. "Fue una semana larga. Tuve algunos altibajos. Y, ya sabes, soy muy afortunado de estar aquí".