Dani Olmo y la nueva crisis del Barça

El año ha comenzado de la peor manera posible para el F.C. Barcelona, y no hablo del equipo porque por el momento los de Flick están teniendo una temporada que los mantiene aspirando a todo; me refiero al club como institución, una entidad donde los desaciertos de quienes la gestionan han provocado que su reputación se encuentre por los suelos, transitando de crisis en crisis, la última, el actual papelón en el caso Dani Olmo.

Sin permitírselo, el club adquiere al jugador el pasado verano por la suma de cuarenta y ocho millones de Euros en un desafío total a un presupuesto diezmando desde hace años a consecuencia de los problemas económicos por los que atraviesa. Pero, también retando a las regulaciones de La Liga, específicamente la ´Regla Uno a Uno´ del ´Fair Play Financiero´, un mecanismo diseñado para controlar que los clubes no gasten más de lo que ingresan en sus arcas.

Conociendo esa realidad, y a pesar de todo, el Barça decidió asumir el riesgo de traer al jugador, consciente de que su inscripción al inicio de la temporada no estaba garantizada, las cuentas no cuadraban y la masa salarial de la plantilla estaba a tope, lo que provocó que Olmo se quedase al margen durante la dos primeras jornadas. Para su suerte, la lesión prolongada de Andreas Christensen liberó espacio en el plantel y el de Terrassa pudo ser inscrito de manera provisional. Sin embargo, la Liga le otorgó al club catalán un plazo hasta el 31 de diciembre pasado para regularizar la situación.

El plazo llegó sin que el Barcelona haya podido cumplir y, como consecuencia de ello, al jugador le fue reiterada su inscripción; es decir, hoy es un futbolista libre con el derecho de poder negociar con el equipo que quiera.  Para empeorar aún más las cosas, pudiendo exigirle al Barça la totalidad de lo que se pactó económicamente en su contrato.

De los desastres de la era Bartomeu, pasando por el caso Negreira al caso Dani Olmo, el actual presidente Joan Laporta se encuentra ante el fiasco más grande que haya podido conocer en cualquiera de sus dos etapas al frente del club. Lo más lamentable es la forma cómo está tratando de afrontar este atolladero, dando patadas de ahogado ante la justicia ordinaria buscando, y no encontrando, soluciones que las propias regulaciones de La Liga y la Real Federación Española de Fútbol establecen de manera clara.

Las últimas balas ´culers´ tratando de revertir las cosas han sido lanzadas con la solicitud de medida cautelar al Consejo Superior de Deportes (CSD) de España. Sin embargo, se cual sea el resultado, se logre inscribir o no a Dani Olmo, la imagen de uno de los clubes más grandes del mundo transita hoy por el más bajo de los suelos. 

Francisco Lapouble

• 

Apasionado del fútbol en todas sus facetas.