Aaron Judge cumple en su desafío a Yanquis y MLB con jonrones
El Juez pone fin a más de dos décadas sin cruzar los 60 HR
El béisbol esperó 21 años para ver al sexto hombre que alcanza el umbral de los 60 jonrones en una temporada y ha llegado cuando la liga hace ajustes para reducir ese batazo e incentivar el juego dentro del terreno que, precisamente, el cuadrangular avasalló en un proceso que inició hace tres décadas, entonces impulsado por muchas jeringas.
Si el béisbol fuera tan matemático y predecible como tratan de demostrar las ecuaciones sabermétricas entonces Aaron Judge debe empatar y romper la marca de vuelacercas de la Liga Americana antes de que finalice septiembre, con su tasa de uno cada 10.6 turnos.
Desde que Roger Maris (61) lo hizo como el primero en 1961 nadie en el circuito llegaba a esa cifra.
La pelota que envió a las tribunas del prado izquierdo del Yankees Stadium el martes fue valorizada por SCP Autions entre US$100 mil y US$150 mil, aunque Michael Kessler, un joven de 20 años que la atrapó, decidió entregarla al jugador a cambio de tomarse unas fotos y conocerlo en persona.
Si llegara a romper el récord la bola superaría los US$500 mil, estima la empresa, aunque la del 70 de Mark McGwire en 1998 se vendió por US$3 millones.
Judge lo ha hecho meses después de rechazar una extensión por siete campañas y US$213,5 millones. Apostó por discutir una mejor oferta como agente libre desde noviembre, a pesar de los temores que generan los 31 años que tendrá en abril y un largo historial médico (hombro izquierdo y muñeca derecha) que le ha costado más de 150 partidos.
Adoptado al segundo día de nacer en California en 1992 por una pareja blanca de profesores estériles, “El Juez” tiene la habilidad de ajustar un físico de casi 290 libras y hacer swings hasta las 121 millas por horas a lanzamientos a velocidad de tres dígitos con menos de dos segundos para identificarlos y reaccionar.
Lo hace con una elevada cantidad de ponches (si bien lo ha reducido al 25% de los turnos tras topar techo en el 30.7% en 2017) y de bases por bolas (14% desde el 18.7%).
Este gigante (6’7 pies) sobresalía como centro en baloncesto en el bachillerato al punto de liderar en anotación a su escuela (18.0 el último año). También destacaba en el fútbol americano, tanto como para recibir ofertas de becas de universidades tan exigentes como Notre Dame, UCLA y Stanford. En su último año fijó el récord de pases recibidos para touchdown (17) en un curso en Linden High School.
Pero optó por el béisbol en la Estatal de California en Fresno, con una habilidad tan innata para sacar pelotas del parque que le permitió en su primera estación completa en la MLB (2017) triturar la marca de jonrones para novato (52). Fue elegido el mejor bisoño, aunque sus visitas al médico y la pandemia impidieron que hasta 2021 no volviera a superar los 30.
Cristiano profesante, antes, durante y después de cada partido realiza ritos, como regar 40 semillas de girasol detrás del plato, una por cada miembro del roster y luego ora por ellos.
Favorito al MVP
Tan grande ha sido la temporada que ha agotado Judge que ha variado la narrativa impuesta por el fenómeno sin precedentes de Shohei Ohtani en la discusión sobre el Jugador Más Valioso de su liga.
El guardabosque de los Mulos entró a la jornada del miércoles al frente en la Triple Corona. Lidera en bateo (.316) con Xander Bogaerts (.315) en las orejas, ya sentenció el de vuelacercas (23 más que Yordan Álvarez) y el de carreras remolcadas (128) estaría a punto de cerrarlo con José Ramírez distante (115). Una hazaña que solo se ha producido 12 veces con el venezolano Miguel Cabrera como último en lograrla (2012).
En la fórmula de FanGraphs, Judge encabeza con 10.5 las victorias sobre jugador reemplazo (WAR) en toda la MLB, dos más que el nipón (8.5). En Baseball-Reference la competencia es más cerrada, pero también va delante (9.7) contra 8.8 de Ohtani.
Un favoritismo en un año donde Ohtani (Angelinos) no ha aflojado en su condición de fenómeno; alcanza los 34 jonrones y 89 remolcadas a la vez que acumula foja de 13-8 con efectividad de 2.43 en 148 episodios y 196 ponches.