La Sirenita: Cuatro datos que no sabías del live action

Tras su exitosa presentación en los cines, el tan esperado live action de "La Sirenita" finalmente está disponible en Disney +. Ya sea que desees revivir la magia de esta historia o estés a punto de sumergirte por primera vez en sus encantos, aquí te presentamos cuatro datos curiosos que probablemente desconocías sobre esta película.

1. Nuevas canciones de Lin-Manuel Miranda

La banda sonora de La Sirenita de la década de 1980 fue galardonada con un Premio Oscar a la Mejor Banda Sonora Original. Más allá de las canciones clásicas, esta película presenta nuevos temas, todos creados por Lin-Manuel Miranda, quien no solo es el productor, sino también el letrista detrás de estas emotivas melodías.

2. Inspiración para los movimientos animados

A pesar de que los personajes Sebastián, Scuttle y Flounder son animales, sus movimientos fueron inspirados por los actores que les dieron voz: Daveed Diggs, Awkwafina y Jacob Tremblay. Estos talentosos artistas no solo proporcionaron sus voces, sino que también participaron en el set, donde sus movimientos fueron capturados por un equipo de animación utilizando seis cámaras.

3. Melissa McCarthy se preparó intensamente para cantar "Pobres Almas en Desgracia"

La canción "Pobres Almas en Desgracia" ("Poor Unfortunate Souls") es uno de los temas más icónicos de La Sirenita. Melissa McCarthy, quien interpreta a la malvada Úrsula, entendió el desafío y la responsabilidad que conllevaba interpretar esta canción. Durante meses, ensayó y se preparó intensamente para darle justicia a esta memorable melodía.

4. La experiencia de Rob Marshall como director

El director de La Sirenita, Rob Marshall, confesó que sintió como si estuviera dirigiendo tres películas en una. Esto se debió a la existencia de dos mundos completamente distintos en la película: el mundo submarino mágico y el mundo real en la superficie. El primero fue creado digitalmente, mientras que el segundo implicó construcción física y meticulosa atención a los detalles de época. Además, dado que la película es también un musical, la tarea parecía aún más compleja y desafiante, lo que llevó a Marshall a describir la experiencia como dirigir tres películas distintas simultáneamente.