Vicecónsul en Filadelfia: muchos tienen la idea de que el dominicano vive en Nueva York

“El dominicano, cuando viene para los Estados Unidos, dice: yo voy para Nueva York. Es como si el resto no existiera”, comenta el representante del Gobierno dominicano en Filadelfia, José Mota Fernández.

El funcionario, en los 25 años que lleva residiendo en Filadelfia, ha observado que la diáspora ya no mira solo al lado neoyorquino, donde el costo de la vida es más elevado, sino que la idea de que Estados Unidos “es solo Nueva York” ha cambiado.

Mota es vicecónsul de la Oficina de Enlace Consular de Pensilvania. Antes pasó unos 10 años en el negocio de las bodegas en Filadelfia.

Recuerda que fue en la década de 1990 que hubo un repunte de bodegas dominicanas y enumera que solo en esa ciudad los criollos ya tienen más de 2,000 locales de ese tipo y son la mayoría en un sector que anteriormente era prácticamente de coreanos y puertorriqueños.

Enumera que también hay más de 1,500 salones de belleza, varias bases de taxi y una cantidad importante de agencias de envíos en Filadelfia, una ciudad de unos 2 millones de habitantes, perteneciente el estado de Pensilvania.

Los dominicanos están emigrando hacia Pensilvania porque las viviendas son más baratas y aparecen trabajos en fábricas, donde no necesariamente requieren personal calificado, observa Mota.

Además de Filadelfia, donde hay criollos que emigraron directamente hacia esa ciudad, también hay asentados en Allentown, Reading, Hazleton, Lancaster y York, también en Pensilvania.

“Nueva York es sumamente caro”, dice Mota. “Dominicanos viven allá en una habitación prácticamente, a la que solamente pueden ir a dormir, y ese es su hogar, pagan a veces 1,000 dólares por eso. Aquí en Filadelfia, con 1,000 dólares usted puede pagar una casa buena, y hay lugares acá en Pensilvania en los cuales, usted con 500 dólares, paga una casa de tres habitaciones”.

El funcionario indica que el número que maneja es que en el estado de Pensilvania residen más de 200,000 dominicanos, una cifra que considera conservadora.

“Ahora mismo hay tres comunidades importantes en Filadelfia que son la puertorriqueña, que es la número uno; en segundo lugar, la dominicana; y en tercero la mexicana, que ha crecido bastante”, indica.

El vicecónsul reporta que en Filadelfia hay muchos dominicanos oriundos de Cotuí, de San José de las Matas, Santiago Rodríguez y Mao.

La emigración dominicana hacia los Estados Unidos comenzó a destacarse luego de la caída de la dictadura de Rafael Trujillo en 1961, cuando se inició una flexibilización en la emisión de pasaportes.

El volumen de la diáspora en los Estados Unidos se estima que supera los 2 millones de personas.

El Instituto Nacional de Migración destaca en el informe Perfil Migratorio de la República Dominicana, que los Estados Unidos albergaba en 2017 al 72 % del total de los dominicanos que salieron del país.

“Anteriormente la comunidad dominicana se centraba en la ciudad de Nueva York y ahí era todo, por eso allá en Santo Domingo usted tiene la idea de que el dominicano es en Nueva York que vive”, dice Mota.

En realidad, en parte sigue siendo así. La comunidad más alta de dominicanos en el extranjero se encuentra en Nueva York y se estima sobre las 870,000 personas.

En los Estados Unidos, Nueva Jersey es el estado que tiene la segunda cantidad. Le siguen Florida, Massachusetts y Pensilvania.

Mota destaca que en 2004 se abrió una oficina de la Junta Central Electoral para Pensilvania y Delaware con unos 52,000 electores. Para 2016 el número de votantes inscritos subió a aproximadamente 12,000 y para las próximas elecciones del 5 de julio ha aumentado a 26,074.

El total del padrón de los votantes en el exterior asciende a 595,879 personas, significando el 7.9 % del padrón general de electores.

La Circunscripción 1, a la que pertenece Pensilvania, concentra el 62 % de los votantes dominicanos en el exterior. Cuenta con 674 colegios electorales.

Luego de debates sobre la posibilidad o no de celebrar elecciones en los Estados Unidos, debido a las restricciones para la aglomeración de personas por la pandemia, la Junta Central Electoral aprobó el pasado lunes la resolución 52-2020 con la que convocó a la celebración en el exterior de Elecciones Extraordinarias Presidenciales y de Diputaciones de ultramar.

Mota es miembro de la comisión que procura los permisos para rentar locales en Pensilvania para que los dominicanos puedan votar, tomando las medidas de seguridad ante el coronavirus. En el estado aún hay restricciones, por ello al día de hoy está cerrada la oficina del Consulado.

El vicecónsul reporta que las muertes de dominicanos por el COVID-19 en Filadelfia han sido mínimas, a diferencia de Nueva York, que es el epicentro de la enfermedad en los Estados Unidos.

De hecho, Mota se contagió del virus cuando visitó la República Dominicana para las elecciones extraordinarias municipales del pasado 15 de marzo, pero no tuvo síntomas considerables.

Su hermano y la esposa del funcionario también se enfermaron y tuvieron que ser hospitalizados.

Según el conteo en tiempo real que mantiene la universidad Johns Hopkins, hasta el 27 de mayo en Filadelfia se habían infectado 21,738 personas con el COVID-19 y 1,243 fallecieron.

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