Demócratas en el Congreso divididos entre respaldar a Biden para presidente y hacer sonar las campanas
Biden ha señalado que no tiene intención de abandonar la carrera contra Donald Trump
La desastrosa actuación del presidente Joe Biden en el debate ha repercutido en todo el Partido Demócrata, obligando a los legisladores a lidiar con una crisis que podría poner patas arriba las elecciones presidenciales y cambiar el curso de la historia estadounidense.
El presidente demócrata ha señalado que no tiene intención de abandonar la carrera contra Donald Trump a pesar de la entrega vacilante y desigual del debate que arrojó luz sobre las preguntas sobre la edad y la capacidad de Biden para ser presidente. Pero a medida que los demócratas argumentan que lo que está en juego en las elecciones es trascendental, desafiando nada menos que los cimientos de la democracia estadounidense, están luchando con cómo acercarse al hombre de 81 años que se supone que lidera la carga de su partido.
Así es como los demócratas están manejando las secuelas del debate:
El representante Lloyd Doggett, de Texas, se convirtió el martes en el primer demócrata en ejercicio en el Congreso en pedir a Biden que se retire de la carrera. Elogió a Biden, pero dijo que "tiene la oportunidad de alentar a una nueva generación de líderes entre los que se pueda elegir un candidato para unir a nuestro país a través de un proceso abierto y democrático".
"Reconociendo que, a diferencia de Trump, el primer compromiso del presidente Biden siempre ha sido con nuestro país, no consigo mismo, tengo la esperanza de que tome la dolorosa y difícil decisión de retirarse. Le pido respetuosamente que lo haga", dijo Doggett, de 77 años.
Algunos otros demócratas del Congreso se han movido en los últimos días a una preocupación abierta no solo por el desempeño de Biden durante el debate de 90 minutos la semana pasada, sino también por el nivel de transparencia que el equipo de Biden ha ofrecido sobre su estado mental. Han pasado de puntillas por la idea de que Biden debería retirarse.
"Todo el mundo se hace una pregunta dentro del Partido Demócrata (...) que es cómo derrotamos a Donald Trump y cómo vamos a derrotar la amenaza del autoritarismo", dijo el representante Jamie Raskin, un prominente demócrata de Maryland, en MSNBC el martes por la noche.
Agregó que la cuestión de si Biden se queda como candidato presidencial o si los demócratas seleccionan a otra persona "es un objetivo móvil. Tiene que suceder rápido".
El senador Sheldon Whitehouse, demócrata por Rhode Island, dijo a una estación de televisión local afiliada a CBS que estaba "horrorizado" tanto por la actuación de Biden como por las falsedades de Trump durante el debate.
"La gente quiere asegurarse de que esta sea una campaña que esté lista para ganar", dijo Whitehouse. "Que el presidente y su equipo están siendo sinceros con nosotros sobre su condición, que esto fue una anomalía real".
A algunos les preocupa que las debilidades de Biden puedan frenar el entusiasmo de los posibles votantes, creando un efecto dominó que perjudique a los demócratas mientras intentan mantener una estrecha mayoría en el Senado y recuperar el control de la Cámara de Representantes. Los demócratas ya confían en que pueden superar a Biden en las contiendas indecisas, pero si un gran número de votantes rechaza a Biden, podría afectarlos.
Si bien varios demócratas vulnerables no han llegado a pedir que Biden se retire, también han planteado la situación en términos duros: si Biden continúa, perderá.
"La verdad, creo, es que Biden va a perder ante Trump", dijo la representante Marie Gluesenkamp Pérez, demócrata de Washington, a una estación de televisión afiliada a ABC. "Sé que es difícil, pero creo que el daño ya está hecho por ese debate".
Respaldo a Biden
Con la familia de Biden instándolo a permanecer en la carrera, la atención se ha centrado en los legisladores demócratas de alto rango que podrían persuadir al presidente para que retire su nominación. Hasta ahora, los principales líderes demócratas han respaldado en su mayoría a Biden en declaraciones públicas.
"No ha habido discusiones entre los altos líderes sobre otra cosa que no sea asegurarnos de que sigamos articulando una visión convincente para el futuro del pueblo estadounidense relacionada con los temas de importancia en torno a la economía", dijo el líder demócrata de la Cámara de Representantes, Hakeem Jeffries, a periodistas el lunes en Pittsburgh.
El líder de la mayoría del Senado, Chuck Schumer, un demócrata de Nueva York, publicó en X, la plataforma antes conocida como Twitter, después del debate que mostraba a los votantes que había que elegir entre "cuatro años más de progreso o cuatro años más de ataques a nuestros derechos fundamentales y nuestra democracia".
Biden habló con líderes del Congreso esta semana, dijo el martes la Casa Blanca. La secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, dijo que respetaban las opiniones y pensamientos de los miembros del partido preocupados, y agregó que "eso es lo que hace que este partido sea diferente del otro lado".
Muchos de los aliados de Biden han reprendido a los medios de comunicación por estar obsesionados con las capacidades mentales de Biden, argumentando que, en cambio, la atención debería centrarse en el historial de Trump de negarse a aceptar los resultados de las elecciones de 2020 que perdió ante Biden y mentir repetidamente.
La representante Verónica Escobar, una demócrata de Texas que forma parte del comité de campaña de Biden, admitió que el debate no fue lo que esperaba, pero agregó: "Creo que debe haber una conversación real sobre las cosas que dijo Donald Trump. Es más que vil".
El representante Robert García, demócrata de California, quien fue uno de los sustitutos de Biden en el debate, desestimó las preocupaciones.
"Estamos 100 % detrás de Joe Biden", dijo el viernes. "Muy claro, fin de la historia. Es nuestro nominado. Así que cualquier otra cosa fuera de eso es solo charla política".
Tanteando
El debate del 27 de junio infundió una nueva dinámica a una contienda electoral que había estado marcada por pocas sorpresas. Los votantes estaban familiarizados con Biden y Trump y ya habían decidido entre los dos en 2020.
Aun así, muchos demócratas de la Cámara de Representantes se vieron atrapados en un estado de incertidumbre mientras se enfrentaban a un aluvión de preguntas la mañana después del debate. Algunos lo calificaron como poco más que una mala noche para Biden, pero otros están observando de cerca para ver cómo reaccionan los votantes y si Biden puede ejecutar una rápida recuperación política.
El representante James Clyburn, un demócrata de Carolina del Sur que ayudó a Biden a ganar la nominación demócrata en 2020, instó a su partido la semana pasada a "mantener el rumbo".
Para el martes, Clyburn todavía apoyaba a Biden para presidente, pero también le dijo a MSNBC que "Biden puede decidir lo contrario". Clyburn agregó que apoyaría a la vicepresidenta Kamala Harris si Biden se retiraba.
Clyburn y otros como la expresidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, demócrata de California, están recomendando que Biden demuestre al pueblo estadounidense que está listo para otros cuatro años en el cargo saliendo y aceptando entrevistas difíciles, algo que rara vez ha hecho en los últimos años. Biden se sentará para una entrevista con ABC, la primera desde el debate, más adelante en la semana.
Tanto Clyburn como Pelosi dijeron a MSNBC al mediodía del martes que no habían hablado directamente con Biden desde el debate. Pero Pelosi aún enfatizó que el presidente está "en la cima de su juego, en términos de conocer los problemas y lo que está en juego".
Pidió tanto a Biden como a Trump, de 78 años, que se sometan a pruebas de salud y agudeza mental.
"Creo que es una pregunta legítima decir si esto es un episodio o es una condición. Entonces, cuando la gente hace esa pregunta, es legítima, de ambos candidatos", dijo Pelosi, de 84 años.
Mientras tanto, los legisladores de base están atentos para ver cómo las encuestas de votantes registran el impacto y si se extiende a las contiendas electorales. Durante meses, los demócratas vulnerables de la Cámara de Representantes se han distanciado de algunas de las políticas de Biden. Ese fenómeno podría acentuarse después del debate.
El representante Jared Golden, un demócrata moderado de Maine, ya estaba buscando formas de convencer a los posibles votantes de Trump para que lo apoyaran.
"Si bien no planeo votar por él, Donald Trump va a ganar", dijo Golden en un artículo de opinión del Bangor Daily News. "Y estoy de acuerdo con eso".
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