EEUU redujo emisiones en 2023 pero no lo suficientemente rápido, dice informe

Estados Unidos redujo emisiones en 1.9 % en 2023

Descenso de emisiones en EE.UU. no cumple con las expectativas. (Fuente externa)

Estados Unidos redujo sus emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) en 1.9 % interanual en 2023, un descenso bien recibido pero insuficiente para cumplir los objetivos del Acuerdo de París, según un informe publicado este miércoles por el centro de investigación Rhodium Group.

El segundo mayor emisor del mundo se ha comprometido a mermar sus emisiones a la mitad para 2030 en comparación con los niveles de 2005, lo que significa que el ritmo de descenso de 2023 "debe triplicarse con creces y mantenerse en ese nivel cada año desde 2024 hasta 2030 para cumplir el objetivo", según el reporte.

De momento, el descenso desde 2005 es del 17.2 %, de acuerdo con esa estimación.

La reducción de las emisiones en 2023 con respecto a 2022 se debe en particular al descenso de la generación de electricidad a partir del carbón, sustituido progresivamente por centrales de gas y energías renovables.

La disminución es "un paso en la dirección correcta", según el grupo.

"Pero la fecha límite para cumplir el objetivo climático de Estados Unidos para 2030 en el marco del Acuerdo de París de una reducción del 50-52 % (...) se acerca rápidamente, y el logro de ese objetivo parece cada vez más difícil si no hay un nuevo impulso político importante", prosiguió.

El documento señala que aún es demasiado pronto para evaluar los grandes planes de inversión del presidente Joe Biden para la transición energética.

Además, mientras la producción de electricidad disminuye, el sector de los transportes, a la cabeza de las emisiones de gases, sigue generando más, sobre todo por el aumento del tráfico aéreo y el creciente consumo de gasolina.

"Para cumplir el objetivo de París, Estados Unidos necesita una reducción media de las emisiones del 6.9 % cada año desde 2024 hasta 2030, más del triple que en 2023 (1.9 %)", según el informe.

Estados Unidos es actualmente el segundo mayor emisor de GEI en términos absolutos, por detrás de China. Pero si se tienen en cuenta las emisiones históricas, sigue a la cabeza.

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