Diseñadora colombiana se declara culpable de contrabando de pieles de animales a EE.UU.

La diseñadora colombiana Nancy González, extraditada a EE.UU. por contrabando de artículos de cuero elaborados con pieles de animales exóticos y en peligro de extinción, se declaró este viernes culpable de tres cargos en una corte federal de Miami (Florida).

El Departamento de Justicia (DOJ) informó que Nancy Teresa González de Barberi, de 70 años, se declaró culpable de dos cargos de contrabando y uno de conspiración por la importación ilegal de bolsos de diseñador hechos de piel de caimán y pitón desde Colombia a Estados Unidos.

Ambas especies están protegidas por la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (CITES), de la que tanto Estados Unidos como Colombia son signatarios, explicó el DOJ en un comunicado.

El contrabando se realizó desde febrero de 2016 hasta abril de 2019.

González fue extraditada a Estados Unidos el pasado 30 de agosto en una acusación que incluye a otras dos personas y su compañía Gzuniga Ltda.

Según la Fiscalía, "los acusados solicitaron a amigos, familiares y empleados de la empresa manufacturera de González en Colombia que actuaran como mensajeros y transportaran los bolsos de diseñador en su persona o en su equipaje mientras viajaban en aerolíneas de pasajeros".

Una vez que los bolsos fueron introducidos de contrabando en los Estados Unidos, añade, se enviaron a la sala de exposición de González en Manhattan (Nueva York), "donde fueron exhibidos para que los minoristas de alto nivel los vieran y los compraran para revenderlos en sus tiendas".

El precio minorista promedio de estos bolsos de la marca "Nancy González" fue de más de 2,000 dólares.

González diseñaba productos exclusivos para celebridades como Salma Hayek, Britney Spears y Victoria Beckham, entre otras, según medios locales, y su nombre apareció en películas como 'The Devil Wears Prada' (2006).

La sentencia para González fue fijada para el 5 de febrero de 2024.

La diseñadora enfrenta hasta cinco años de prisión por el cargo de conspiración y hasta 20 años de prisión por cada uno de los cargos de contrabando y posibles multas de hasta 250,000 por cada cargo.