Detienen a un hombre por palmar nalgas a reportera durante transmisión en vivo en España

Un hombre que palmeó este martes las nalgas a una reportera de televisión en España en directo fue detenido poco después, informó la policía, en plena polémica por el beso no consentido del presidente de la federación española de fútbol a una jugadora.

"Detenido por agredir sexualmente a una reportera mientras estaba realizando un directo de televisión", informó la Policía Nacional española en la red social X -antes Twitter-, junto a un video de la detención.

Desde una reciente reforma del Código Penal español, todo abuso sexual puede considerarse agresión sexual, una categoría penal que agrupa todos los tipos de violencia sexual.

Los hechos ocurrieron este martes, cuando la reportera Isa Balado comentaba unas detenciones en Madrid y un joven se le acerca por detrás y le palmea el trasero, según se pudo ver en el programa "En boca de todos", del canal de televisión Cuatro.

El joven se queda a su lado molestando, y un presentador del programa le pregunta incrédulo a la reportera: "¿te acaba de tocar el culo?".

"Sí", responde ella, antes de dirigirse al joven: "por mucho que quieras preguntarnos de qué canal somos, ¿de verdad tienes que tocarme el culo?". El joven niega haberlo hecho, pero antes de irse le acaricia el pelo a la periodista.

"En una sociedad que queremos que sea mejor esto no puede ocurrir y no puede existir esta sensación de impunidad. Esto es una falta de respeto y espero que caiga sobre él todo el peso de la ley", dijo el presentador del programa, Diego Losada, según la página web de Cuatro.

La ministra de Igualdad en funciones, Irene Montero, escribió en X: "Los tocamientos no consentidos son violencia sexual y decimos basta a la impunidad".

Este episodio se produce poco después de la dimisión del presidente de Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Luis Rubiales, por besar en la boca a la jugadora Jenni Hermoso en los momentos posteriores a la victoria de España en el Mundial femenino, en Australia.

El beso, que la jugadora dijo que no había sido consentido, desató una tormenta nacional e internacional que provocó la dimisión de Rubiales, que además el viernes tendrá que responder del episodio ante un juez.