Reubican a director médico tras la muerte de una niña bajo custodia de Patrulla Fronteriza

La Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP por sus siglas en inglés) reubicó a su director médico después de la muerte de una niña de 8 años en custodia cuya madre había suplicado una ambulancia pero fue ignorada a pesar de que la menor tenía un problema cardiaco crónico, un raro trastorno sanguíneo, fiebre alta y otras enfermedades, dijeron el jueves autoridades.

El doctor David Tarantino fue la primera persona de la CBP en el cargo creado en 2020 en medio de un aumento del número de familias y menores que presentaban problemas complejos de salud durante su detención por la Patrulla Fronteriza.

La CBP elogió a Tarantino por sus “años de servicio” y su papel en la ampliación de los servicios médicos a personas detenidas, pero señaló que era hora de un cambio. Tarantino tiene previsto asumir un cargo la próxima semana de manera temporal en el Departamento de Seguridad Nacional, que incluye a la CBP. The Washington Post fue el primer medio en informar sobre la asignación de Tarantino a otras labores.

Anadith Danay Reyes Álvarez fue trasladada con su familia a una estación de la Patrulla Fronteriza en Harlingen, Texas, después de que le diagnosticaran gripa hasta que falleció el 17 de mayo, en su noveno día bajo custodia. El personal había tenido unas nueve interacciones con la niña panameña y su madre en los últimos cuatro días de vida de la menor.

“A medida que la CBP trabaja a fin de poner en marcha las mejoras requeridas para nuestras políticas y procesos de atención médica, incluida la investigación en curso sobre la trágica muerte de una menor en custodia en Harlingen, estamos aportando un alto liderazgo adicional para impulsar la acción en toda la agencia”, dijo la CBP en un comunicado.

Una enfermera informó que rechazó tres o cuatro solicitudes de la madre de la niña para que viniera una ambulancia, a pesar de que la menor tenía una temperatura de 40.5 grados Celsius (104.9 °Fahrenheit), náusea y dificultades para respirar, según la Oficina de Responsabilidad Profesional de la CBP.

La menor recibió medicamentos, una compresa fría y una ducha fría.