Hombre comparte fotografía desnuda de su hijo y Google bloquea su vida digital

Un pene hinchado y la sensación de dolor que parecía sentir su hijo, llevó a un padre a tomar fotografías de su entrepierna para registar la evolución de las lesiones del pequeño para posteriormente compartirla con el pediatra, sin pensar en las consecuencias que iba a tener esta situación.

Con el fin de agendar una cita con el médico, la enfermera le pidió a la madre que enviara unas imágenes para que el profesional pudiera adelantar el diagnóstico, la mujer accedió y tomó el iPhone de su esposo para compartir los primeros planos de la ingle de su pequeño hijo. 

Lo que provocó que Mark, su esposo, perdiera una década de contactos, correos electrónicos y fotos, además, la policía abrió una investigación contra él, al quedar atrapado en una red algorítimica diseñada para dar con aquellas personas que comparten material relacionado al abuso sexual infantil. 

Esto debido a la presión que reciben las empresas de tecnología para evitar la difusión en línea de este tipo de contenido ante la gran cantidad de datos que reciben, sin contar que archivos privados pueden filtrarse y hacer ver a alguien culpable cuando su comportamiento es totalmente inocente, según señala un medio estadounidense. 

En el caso de Mark, dos días después de enviar las imágenes de su hijo, Google había inhabilitado su cuenta debido a “contenido nocivo”, lo cual constituye “una violación grave de las políticas de Google y podría ser ilegal”. Un vínculo para “conocer más” lo dirigió a una lista de posibles motivos, entre los que figuraba “el abuso y la explotación sexual de menores”.

Ante la notificación, la confusión fue lo primero que se apoderó de Mark, pero al recordar la infección de la que fue víctima el pequeño, pensó que el gigante tecnológico identificó las fotos como "pornografía infantil". 

El hombre solicitó una revisión de la situación a Google y en el formulario explicó la condición de su hijo que lo llevó a obrar de esta manera, para luego descubrir que Google no solo lo "rechazó", sino que también había perdido mensajes, información de contactos, entre ellos amigos y colegas, así como la documentación de los primeros años de su hijo.

La situación de salud de su hijo durante un fin de semana a inicios de 2021 con el COVID-19 todavía afectando la vida social, produjo que la mitad de su vida digital fuera bloqueada, ya sin poder acceder a su número anterior ni a la dirección de correo electrónico, no se le hizo fácil conseguir los códigos de seguridad para recuperar su perfil en otras sitios web.