Un preso fallecido y tres heridos deja un enfrentamiento en cárcel de Ecuador

 Un preso muerto y otros tres heridos dejó este viernes un enfrentamiento entre reclusos en la cárcel de la ciudad de Loja, en el sur de Ecuador, informó el servicio penitenciario nacional en un comunicado.

Los heridos fueron trasladados a centros médicos y se encuentran estables, según la información proporcionada por el Servicio Nacional de Atención Integral a Personas Privadas de Libertad (SNAI).

Los hechos ocurrieron cuando se realizaban acciones de control en los pabellones por parte de los guardias penitenciarios.

En ese momento, un grupo de presos "emboscó" a personal administrativo y a guardias penitenciarios que requisaban objetos perdidos, de acuerdo a la versión brindada por el SNAI.

"En ese momento, las personas privadas de libertad reaccionaron con violencia, entre internos, dejando como saldo un interno fallecido y tres heridos", señaló el comunicado.

Los funcionarios retenidos fueron liberados y puestos a salvo después de que el SNAI activara sus protocolos y recibiera el apoyo de la Policía Nacional.

En los exteriores de la cárcel, fuerzas de seguridad custodian el perímetro mientras la Fiscalía ejecuta las diligencias correspondientes y funcionarios de la Secretaría de Derechos Humanos del Gobierno brindan atención y acompañamiento a los familiares de las personas privadas de libertad.

Ecuador sufre una crisis carcelaria en la que más de 400 presos han muerto desde 2020 en una serie de masacres entre bandas criminales que se disputan el control interno de las prisiones y que, según las autoridades tienen nexos con el narcotráfico.

Recientemente, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) instó a Ecuador a recuperar el control interno de sus prisiones, dar condiciones dignas a los presos y elaborar una política de prevención del delito donde la principal estrategia no sea el encarcelamiento.

Así, el Gobierno se ha dispuesto a prácticamente doblar el número de guardias penitenciarios con la contratación de 1,400 agentes, espera indultar a unos 5,000 presos condenados por delitos menores y que ya han cumplido la mayor parte de su pena, y ha diseñado su primera política pública de derechos humanos a reclusos.