El diseñador español Custo Barcelona hace una oda al vestido discotequero

El diseñador español Custo Dalmau, director creativo de la firma Custo Barcelona, presentó este sábado en la semana de la moda de Madrid una colección con la que ha hecho una oda al vestido discotequero, en una jornada en la que las propuestas de fiestas toman protagonismo y animan un mercado que empieza a despertar tras la pandemia.

Recién llegado de Nueva York, Custo Dalmau asegura que no hay nada como Madrid y su ambiente para lucir las prendas que propone para el próximo otoño-invierno, entre ellos vestidos diseñados en tejidos tecnológicos con brillos y lentejuelas que invitan a la fiesta.

"La moda se está animando, la gente está volviendo a comprar", la moda es socializar, dice el creador, que califica a Madrid como "Disneylandia. Hay más movimiento aquí que en Nueva York, donde se habla de Madrid como ciudad del mundo, es una realidad", advierte.

La colección viene marcada por la funcionalidad de la ropa, "pero buscando un lenguaje emocional con el que queremos llegar más lejos", dijo el diseñador a EFE, momentos antes de su desfile en la pasarela madrileña.

Piezas con las que pretende seducir a las mujeres que con su vestuario quieren "trasmitir su individualidad y su seguridad", afirma el diseñador, que la próxima semana presentará, por primera vez, en la semana de la moda París una colección cápsula.

Llaman la atención los vestidos laminados en aluminio, los top y pantalón en estampado animal con efecto tornasol y los vestidos palettes holográficas que crean geometrías; así como los plumones tecnológicos con bordados tridimensionales y los maxiabrigos, más clásicos, que conviven con otros de pelo sintético.

Después, en el desfile de Lola Casademunt by Mait, no faltaron los estampados de animal, sello de la marca, que en esta ocasión se manifiestan en diferentes formas y texturas, en la tercera jornada de la pasarela madrileña.

Los rojos, tostados, fucsias, morados y azules más saturados y vitalistas dan rienda suelta a la creatividad de Maite, la línea premiun de Casademunt, que subió a la pasarela abrigos "oversize", vestidos con formas asimétricas y largos desiguales, conjuntos de punto o monos que exhalan un espíritu inconformista y fiestero.

Bajo una nube de flashes, la canaria Joana Sanz desfiló para la firma Lola Casademunt by Maite, el primer trabajo con el que vuelve a su profesión tras el ingreso en prisión preventiva de su todavía marido, el futbolista Dani Alves, por violar presuntamente a una joven en una discoteca de Barcelona.

"Joana ha desfilado con prendas de la casa desde 2017, han sido muchas las ocasiones en las que ella ha lucido nuestras creaciones", según Maite Casademunt, directora creativa de la firma, quien reconoce que la modelo está en este desfile por "su profesionalidad".

Claro Couture apuesta por las siluetas lápiz

Con casi 40 años de historia, la firma sevillana Claro Couture trajo a la Mercedes-Benz Fashion Week Madrid una colección que vio desde la primera fila la nieta del rey emérito Juan Carlos I, la mediática "influencer" Victoria Federica de Marichalar y Borbón.

La firma apuesta por mezclar piezas de alta costura con otras más sencillas, porque "al fin y al cabo de esto trata la vida, de equilibrio", contó antes del desfile Beatriz Claro, directora creativa de la casa junto a su padre, Fernando.

Sobre la pasarela se vieron vestidos de silueta lápiz, minifaldas y abrigos "oversize", que se aderezaban con maxisombreros de terciopelo, joyas de latón, zapatos con pulsera al tobillo y botas y guantes metalizados.

La jornada concluyó con la entrega de los premios L'Oréal París a la Mejor Colección de un diseñador, que fue para la firma Isabel Sanchís, mientras que el de Mejor Modelo ha recaído en Lorena Guitán.