Una Navidad un poco más especial

Con la rapidez con que vivimos y la ansiedad que nos generan estos días, es posible que olvidemos completamente de qué se trata la Navidad y por qué se celebra.

Hemos convertido el nacimiento de Jesús y su significado en una sucesión de fiestas y comidas, quedando muy poco espacio para la reflexión y la familia.

Es por eso por lo que te invito a que vivas una Navidad un poco más especial, más centrado en su significado de generosidad, empatía y amor sin límites. Un tiempo para compartir algo más que tragos y regalos.

He estado conversando con algunas personas y han salido muy buenas ideas para compartir y convertir esta navidad en una celebración un poco más significativa para todos:

• Invita personas fuera de tu círculo:  todos conocemos personas que están literalmente solas en navidad y no tienen con quién compartir unas fechas que pueden ser muy difíciles.  Da un paso más e invítalos a tu casa.  Hazlos sentir cómodos y al igual que a todos, asígnales alguna tontería para traer.  Te puedo asegurar que esa persona nunca olvidará el gesto de amabilidad que transformó lo que pudo ser una experiencia muy difícil de sobrellevar.
• Recuerda que no todos están de fiesta: Prepara paquetes de comida y sal a la calle.  Encontrarás gente que tiene que quedarse trabajando, aun tenga familia con quien pasar la navidad.  Policías, bomberos, personal de servicio en hospitales y negocios esenciales, “guachimanes”.  La lista es larga y siempre están ahí, aunque no los veas.  También hay gente que no va a ir a ningún lado porque no tiene casa, posiblemente tampoco cena y lo que compartas con ellos es un tesoro. 
• ¿Y si fuera sostenible?  Leía los consejos de “Una Vaina Verde” en Instagram para una navidad sostenible y me hizo todo el sentido del mundo.  Evitemos el desperdicio, seamos conscientes a la hora de calcular la comida, utilicemos piezas de servicio reusables, pero si vamos a poner desechables, al menos que estos sean biodegradables.  Y así como a veces solicitas que cada uno traiga su bebida, que traigan también su vaso.  Finalmente, pero no menos importante, al final de la cena y la fiesta, que todo el mundo recoja y que los residuos se separen para que puedan reciclarse.
• Prefiere lo local: Hay miles de recetas novedosas y tradicionales que puedes probar para la cena de nochebuena y cientos de ingredientes locales disponibles que pueden ayudar a abaratar costos y le darán un toque y un sazón diferente.  De paso, ayuda a productores nativos a sobrevivir un poco más en medio de esta crisis.
• Visita y lleva alegría: Desde familiares que ya no pueden desplazarse, a asilos, albergues, lugares donde la navidad tiene un significado especial. A veces tu presencia y un abrazo es todo lo que se necesita para transformar el ambiente e impactar vidas.
• Actos de agradecimiento.  Finalizando el año y rodeado de gente que quieres, aprovecha el tiempo para agradecer, para reconocer, para perdonar o para hacer un acto de servicio por otros.  Es mucho lo que pasa en la familia en un año y con Jesús en el centro, repara cualquier cosa que se haya roto. Otra idea: prepara una representación de la navidad con los niños de la casa y permite que ellos mismos reflexionen sobre el significado de la ocasión.  Quizás nunca recuerden lo que sirvieron de cena ese día, pero esto siempre lo llevarán en el corazón.

Haz que esta sea una Navidad un poco más especial para ti y los demás.  Solo cambia el foco y las prioridades, pero deja siempre a Jesús en medio de ella, permitiendo que renazca en tu corazón.

¡Feliz Navidad!