Dra. Erika Pérez Lara: “El exceso de sal y azúcar es uno de los principales problemas en la dieta de los dominicanos”

El 11 de agosto se conmemora el Día del Nutricionista en toda Latinoamérica

Doctora Erika Pérez Lara, nutricionista clínica y hospitalaria. (Pedro Bazil)

El 11 de agosto se conmemora el Día del Nutricionista en toda Latinoamérica, y para saber a qué nivel estamos entrevistamos a la doctora Erika Pérez Lara, nutricionista clínica y hospitalaria.

¿Cómo está la nutrición en Latinoamérica?

Depende de cómo evaluemos la nutrición, de acuerdo con una revisión científica por parte de Galicia y colaboradores en 2016, se evaluaron 22 de los 46 países que pertenecen a Latinoamérica encontrando algunos hallazgos importantes.

En cuanto al retraso en el crecimiento, Guatemala tenía la mayor tasa de prevalencia en niños menos de 5 años; sobre el bajo peso, en ese mismo grupo de edad, en nuestro país se encontró un aumento de un 22.6%.

En la categoría de desnutrición grave, la prevalencia en niños menores de 5 años estuvo por debajo del 5% en la mayoría de los países, lo que la Organización Mundial de la Salud considera aceptable.

En sobrepeso y obesidad, según la revista The Lancet en el 2014, más de 300 millones de adultos en Latinoamérica estaban en sobrepeso y de estos más de 100 millones en obesidad.

Los países en Latinoamérica se han comprometido a alcanzar metas globales de una mejor nutrición para el 2025 y parte de ese esfuerzo tiene relación con proveer sistemas de información más confiables.

En consecuencia, ¿somos más saludables o no?

Somos, en consecuencia, menos saludables. El entorno obesogénico (o pro-obesidad) es lo más retador que encontramos hoy en día. Demasiadas ofertas de alimentos no saludables (comida rápida económica y accesible), la presión social y escasez socioeconómica.

¿Sugerencias para obtener una buena nutrición a partir de la alimentación diaria?

Educarse sobre alimentos es la base para mantener una buena nutrición. Hay que entender cuáles son las fuentes de proteínas, hidratos de carbono y grasas saludables y cómo puedo incluir diariamente todos los grupos de alimentos en mi rutina.

Los hidratos de carbono, proteínas animales y grasas, así como el aporte de fibra a partir de los vegetales, en sus distintas presentaciones, estos grupos de alimentos deben formar parte del plato diario.

¿Cómo varía la nutrición de una persona a otra?

Varía muchísimo. La edad, sexo, actividad física o alguna morbilidad son parte crucial del ajuste individual de cada persona.

Por ejemplo, con la edad suceden los cambios hormonales, metabólicos, preferencias y necesidades nutricionales específicas. Un niño tendrá un requerimiento de proteínas y agua diferente a un envejeciente; un nadador tendrá un aporte de calorías diferente a una persona que camina en el parque. Así como también ser hombre representa una composición muscular distinta a la mujer y, por tanto, sus requerimientos proteicos serán distintos. Tener una enfermedad como la diabetes, hipertensión y daño renal requiere ajustes nutricionales específicos que deben ser atendidos puntualmente.

Cada vez somos menos saludables. El entorno obesogénico (o pro-obesidad) es lo más retador que encontramos hoy en díaDra. Érika Pérez LaraNutricionista clínica y hospitalaria

La ingesta de suplementos proteicos tiene restricción para algunas personas. ¿Quiénes califican?

La ingesta de proteínas en suplementos es una tendencia que debe ser atendida de forma individual y con muchos puntos de observación. Resulta peligroso cómo todas las personas que acuden a un gimnasio adoptan el consumo de proteínas como si fuera parte de un protocolo regular.

Las proteínas deben ser consumidas en los alimentos principalmente (carnes, pescados, quesos, yogur griego, jamones, etc.) y cuando la persona tiene mayores demandas de proteínas (ej. atletas de alto rendimiento, obesidad, enfermedad renal en diálisis) podría necesitar la suplementación porque no logra consumir la meta proteica en alimentos.

Hay otros grupos que podrían beneficiarse, como los vegetarianos (personas que no consumen carnes), cuya meta de proteínas les es difícil satisfacer con alimentos, así como algunos envejecientes que rechazan la mayoría de las fuentes de proteínas sea por problemas de dentadura o preferencia y deben suplementarla.

Los pacientes que deben tener mayor cuidado son aquellos con insuficiencia renal crónica no en diálisis (alteración de la función renal que se manifiesta por creatinina elevada), también aquellos que tienen predisposición a formación de cálculos renales o vesiculares pues el exceso de proteínas predispone a la mayor formación de piedras a base de calcio. En las edades pediátricas también deben evitar el consumo excesivo de proteínas, principalmente suplementos.

¿Qué problemas de nutrición enfrentamos los dominicanos?

La falta de educación nutricional y de enfermedades, la escasez económica, la pobre cobertura por parte de aseguradoras de salud de las consultas de nutrición, representan las principales limitaciones para que los dominicanos puedan tener una adecuada nutrición. La inseguridad también representa uno de los principales problemas para que podamos realizar actividad física libremente y transportarnos en medios locales y no en nuestros propios vehículos.

¿Cuántas personas sufren de hambre en Latinoamérica?

De acuerdo con una publicación de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) en el 2021, en tan solo un año, con el contexto de la pandemia, el número de las personas viviendo con hambre incrementó a 13.8 millones, alcanzando un total de 59.7 millones de personas.

La prevalencia de hambre en Latinoamérica y el Caribe ahora se encuentra en 9.1%, la más alta en los últimos 15 años, pero ligeramente menor que el promedio mundial de hambre de un 9.9%.

¿Cómo califica la calidad de la alimentación en RD?

La base nutricional es buena (arroz, leguminosas, carnes, verduras), pero la condimentación es uno de los principales problemas, principalmente el exceso de sal y azúcar. El uso de sopitas, sazones cargados de sal y el azúcar para “dorar” las carnes, son extras que restan calidad a nuestra alimentación.

También el consumo de jugos, frituras, embutidos (salami) y el pobre aporte de fibra por frutas y verduras forman parte de la problemática principal. Tenemos que equilibrar mejor nuestro plato, reduciendo el aporte de arroz y aumentando el de proteínas y verduras.

¿Cómo debe darse la distribución de los alimentos (nutrientes) en nuestra dieta diaria?

Idealmente hay que individualizar las necesidades de cada persona, pero en general se propone de un 50-60% de hidratos de carbono, 20% de proteínas y 20-30% de grasas, principalmente grasas mono/poliinsaturadas (conocidas como grasas saludables).

¿Están garantizados los nutrientes en las comidas que compramos ya preparadas?

Depende de lo que se compre. Los nutrientes dependerán del modo de cocción, de la preservación y del tipo de alimento en cuestión. Contamos con una gran variedad de alimentos ricos en nutrientes que vienen listos para comer, pero la lista de los carentes en nutrientes es mucho más larga.

Norys Sánchez es periodista. Formó parte del equipo fundador de Revista Rumbo y Diario Libre. Fue editora de la revista Madre Única. Autora del libro La palabra de los sueños, una selección de entrevistas a personalidades del mundo político, económico, diplomático y social del país, y “Eternamente Oliver”, donde relata sus vivencias con su perrhijo Oliver y cómo se convirtió en un miembro más de la familia.