Estrés decisional: qué es y cómo evitarlo

¿Has oído hablar del estrés decisional? Es una angustia que se produce cuando hay que tomar demasiadas decisiones sobre un mismo tema. Y aunque parezca inicialmente inofensivo, puede afectar a la salud mental.

Se asocia al estrés decisional con el sobreanálisis de cosas banales o intrascendentes. La fatiga decisional es silenciosa y, generalmente, la reconoces cuando ya te está afectando.

Si bien es bueno tener muchas alternativas, no es del todo cierto o al menos no lo es en todos los casos. Lo ideal es un equilibrio entre la variedad de opciones y el pragmatismo. El estrés decisional se asocia también a la falta de rutinas, que suelen funcionar como un protector mental contra el estrés.

Algunas consecuencias del estrés decisional:

Impulsividad: al ser un problema la toma de decisiones, muchas personas optan por la alternativa contraria y se vuelven precipitadas.

Procrastinación: al estar constantemente cansadas, algunas personas optan por volverse evitativas y postergan actividades importantes.

Cómo evitar el estrés decisional:

Planifica: lo ideal es armar rutinas y programar las actividades diarias. Así las cosas, no hay que preocuparse tanto por decisiones cotidianas.

Prioridades: a la hora de planificar, asigna valores y prioridades a tus tareas. Algunas decisiones son más complejas, pero no son difíciles ni urgentes.

Planifica por la mañana: es mejor que hacerlo por la noche. El cerebro está descansado y suele ser más sencillo ajustar tu rutina.