Personas sordas en RD, una comunidad que sigue en la lucha por sus derechos

Este año, el Día Internacional de las Lenguas de Señas encuentra a la comunidad sorda dominicana en la lucha porque se reconozcan sus derechos

Pablo Taveras y Alan Jesurum. (Pedro Bazil)

El 23 de septiembre de cada año se celebra el Día Internacional de las Lenguas de Señas, una fecha instituta por las Naciones Unidas para apoyar y proteger la identidad lingüística y la diversidad cultural de las personas sordas. La celebración coincide con la Semana Internacional de las Personas Sordas (la última semana del mes de septiembre), que este año encuentra a la comunidad dominicana en la lucha porque se reconozcan sus derechos.

Así lo manifiestan Pablo Taveras y Alan Jesurum, presidente y secretario de la Asociación Nacional de Sordos (Ansordo), respectivamente. Si bien es cierto que en los últimos años en el país se habla cada vez más de inclusión, ambos coinciden en las personas sordas todavía no tienen el acceso que eso implica. “No tenemos intérpretes, por lo que no tenemos acceso a las informaciones”, refiere Jesurum. “Si se habla tanto de inclusión, dónde está el acceso, porque no lo vemos”.

El hecho de que los hospitales y clínicas, así como los centros educativos y de información del país no cuenten con intérpretes de la lengua de signos es la forma más común de discriminación a la que se enfrentan, lo que los condena a vivir en la desigualdad. En el ámbito laboral también hay rechazo, lo cual es notorio cuando les niegan un trabajo basado en la falsa concepción de que su discapacidad auditiva es una limitante, dicen.  

En búsqueda de que se regule la lengua de señas

Lo que quizás algunos desconocen es que la comunidad de sordos dominicana tiene su propia lengua de señas, que es una mezcla entre la que se emplea en Estados Unidos y signos propios de República Dominicana. En 2019, gracias a una alianza en conjunto entre el Ministerio de Educación, el Consejo Nacional de Discapacidad (Conadis) y Ansordo, se creó el primer diccionario oficial de lengua de señas dominicano.

“La lengua de señas en el país surgió como en los años 70 u 80, de la mano de misioneros estadounidenses que vinieron al país y enseñaron la lengua de señas americana. Desde ese momento se empezó a usar en el país una mezcla entre la americana con la dominicana”, explica Taveras. 

El lanzamiento del diccionario representó un “avance sin precedentes" para el ejercicio de las políticas públicas de inclusión de la población con discapacidad y sus familias. Sin embargo, siguen en la lucha para que el Senado de la República apruebe un proyecto de ley para regular la lengua de señas en el país. 

“El proyecto de ley de lengua de señas tiene desde 2014 que lo depositan para que se apruebe, pero lo depositan, lo vuelven a depositar, pero nunca se ha aprobado”, indica Jesurum. “Ya tiene muchos años en eso. Ahora, en este año, la Cámara de Diputados lo aprobó en las dos lecturas, pasaron el proyecto al Senado y estábamos abogando para que se incluyeran nuestras observaciones, pero ahora tenemos que volver a hacerlo otra vez con ese proceso”.

De aprobarse, las personas con discapacidad auditiva tendrían garantizado el acceso al sistema educativo, al área laboral y de salud sin tener que depender de sus familiares. “Muchas personas sordas tienen a un familiar de intérprete, lo que les impide tener una vida independiente”, agregan.

En la actualidad, la única ley que existe sobre discapacidad es la 05-13, cuyos principios son el respeto a la dignidad inherente a la condición humana, la no discriminación, la igualdad de derechos, equidad, solidaridad, justicia social, integración e inclusión, participación y accesibilidad.

Aunque la prioridad es que se apruebe la ley de la lengua de señas, desde Ansordo enfatizan que trabajan en otros proyectos a fin de lograr la inclusión real en la sociedad de la comunidad sorda, como que se les garantice intérpretes a los estudiantes. “El Ministerio de Educación superior no da intérpretes a los estudiantes sordos y estos deben pagar sus propios intérpretes”, refiere el presidente de la entidad. “Es una frustración, porque no podemos estudiar sin intérprete, pero no tenemos el dinero para pagar el servicio”.

También están trabajando para hacer alianzas con instituciones del Estado, como la Policía Nacional, para enseñar la lengua de señas dominicana y habilitar cursos para las personas y otras entidades que deseen aprenderla. 

Así celebrarán

Para celebrar el Día Internacional de las Lenguas de Señas y la Semana Internacional de las Personas Sordas realizarán una manifestación pacífica el 27 de septiembre, de 9:00 de la mañana a 12:00 del mediodía, frente al Congreso Nacional. La intención es seguir insistiendo para que se apruebe el proyecto de ley de lengua de señas. 

“Algunos de los senadores y diputados no saben nuestras necesidades y quizá no ven el beneficio de eso, piensan que no es necesario, pero sí lo es. Necesitamos una ley que hable de nosotros como comunidad, de nuestra lengua y que detalle el acceso que necesitamos y cómo lograrlo”, explica Pablo.

A eso añaden que las leyes relacionadas a las personas con discapacidad no deben ser “un tema de intereses políticos”, sino una necesidad. “Somos personas, eso es urgente para nosotros que nos den la oportunidad de desarrollarnos como ciudadanos dominicanos que somos”. 

Además, con esta manifestación buscan dar visibilidad a su cultura, identidad y lengua, así como estrechar lazos con la comunidad sorda y dar a conocer lo que hacen como asociación.

Los interesados en aprender lengua de señas pueden contactar a la Asociación Nacional de Sordos a través de Instagram y Facebook como @ansordord y por WhatsApp: 809-441-6462.

Periodista de Revista. Le apasiona escribir sobre salud mental y relaciones de pareja. De no ser periodista, sería psicóloga con un blog.