Cuevas del Pomier: entre el llamado a preservar y el clamor de trabajar
Pequeños mineros aseguran las autoridades ordenaron el cese de sus operaciones hace dos meses
Arqueólogo recordó que este espacio constituye uno de los legados históricos más importantes de Las Antillas
El reciente estudio del experto estadounidense en cuevas George Veni sobre los impactos de la minería en la Reserva Antropológica Cuevas de Borbón o del Pomier ha motivado que se retomen los llamamientos de resguardar esa área protegida de San Cristóbal, considerada uno de los patrimonios históricos más valiosos del país.
A medida que se intensifica el pedido de preservar este monumento natural, los mineros locales, cuyo sustento aseguran que depende de la extracción de caliza en la zona, solicitan que se les permita trabajar.
El pasado viernes, el arqueólogo y espeleólogo Domingo Abreu desarrolló en el recinto de la Universidad Autónoma de Santo Domingo en San Cristóbal una exposición sobre la importancia y los riesgos que amenazan ese monumento natural, cuya declaración como área protegida se remonta al 1993.
Abreu recordó que este espacio constituye uno de los legados históricos más importantes de Las Antillas, debido a, entre otras cosas, las pinturas prehistóricas y grabados rupestres plasmados en las cuevas.
Consultado sobre las áreas de la reserva que requieren atención, el especialista sostuvo: “Ahora mismo la parte noroeste de la Reserva, donde está el río Nigua y donde hubo algunas cuevas son las más afectadas”. Añadió que la parte sur de la reserva también ha resultada impactada por las operaciones mineras.
Capital Prehistórica
Abreu es uno de los propulsores de un proyecto que busca declarar la reserva como “Capital Prehistórica de Las Antillas”, con el objetivo de “asegurar para siempre la protección física del legado rupestre y arqueológico más numeroso y diverso que se conoce en todo el arco antillano”.
La declaratoria busca, además, “liberar definitivamente al complejo de cuevas de la presión minera, además de fomentar la visitación del público nacional e internacional hacia el complejo de cuevas, motivando la visitación ecoturística y espeleoturística”.
El arqueólogo sostuvo que la iniciativa abarcaría la habilitación con senderos, parqueos, áreas de servicio y recepción del área de cuevas, además se contemplaría la posibilidad de construcción de edificios de alojamiento: posadas, hostales, albergues o similares.
“Se necesita que el pueblo de San Cristóbal respalde la propuesta del traslado de las empresas que están en el entorno del Pomier”, manifestó Abreu, quien añadió que “hay una disposición de parte de las autoridades de San Cristóbal y a nivel nacional para que eso ocurra”.
Valor para artesanos
Ramón Guillén, un artesano que se ha dedicado al oficio por 40 años, expresó tras la exposición de Abreu, que los grabados plasmados en el Pomier son utilizados por artesanos para la creación de platos, vajillas y otros artículos que son posteriormente vendidos a los turistas en zonas como Bávaro, Puerto Plata y Las Terrenas.
“Estamos produciendo más de 200, 000 unidades al año. Nosotros utilizamos también los diseños de las cuevas del Sanabe (en Sánchez Ramírez), pero las del Pomier son las que tienen más (…) esas cuevas hay que preservarlas por encima de todo porque es patrimonio de nosotros, es parte de nuestra cultura y parte de nuestra identidad”, indicó.
El también director general de Fomento y Desarrollo de la Artesanía sostuvo que la artesanía proveniente del Pomier contribuye a que muchos jóvenes no estén en las calles. “Muchos jóvenes con lo que se ganan van a la universidad”, sostuvo.
Mineros del Pomier: “Déjennos trabajar”
La operación minera en la zona del Pomier no es algo nuevo. Hombres como Santo Jorge, residente de la localidad El Manuey, solo han conocido en más de 50 años de vida el trabajo vinculado a la extracción de un tipo de caliza valiosa por usos que van desde la medicina hasta la agropecuaria.
Sentado en la edificación que alberga a la Asociación de Mineros del Pomier, Jorge explica que hace dos meses las autoridades ordenaron el cese de sus actividades, contrario a las empresas grandes de la zona, que mantienen sus operaciones, algo que considera “una pequeña maldad”.
Los “pequeños mineros” explican que para sacar el material usan los servicios de una retroexcavadora y alrededor de 50 camiones “que ahora no están haciendo nada”.
Los lugareños añaden que las cuevas están a unos dos kilómetros de la zona donde operan y que la asociación resguarda las cuevas “y todo lo que se ha dicho que es área protegida”. Referente al proyecto para declarar el Pomier como Capital Prehistórica de Las Antillas”, sostienen: “aquí cuando vienen los turistas jamás vuelven, ¿quién se va a meter en una furnia como esa?”.
Señalaron que se han reunido con representantes de la Dirección de Minería, quienes les han manifestado que se prevé establecer un parador, a los fines de delimitar la zona donde podrán operar, con la que dice estar de acuerdo. “Nosotros lo que queremos es que nos dejen trabajar”, señala Francisco Jorge.
“Estamos esperando tras el cambio de Gobierno, pero en cualquier momento nos vamos a tener que lanzar a la calle”, advierten, “estamos aguantando a ver lo que viene”.
El informe preliminar del estadounidense resalta que se confirmó la ubicación y entrada de 24 cuevas, de las que hay nueve cavernas que han sido afectadas por la actividad minera y otras siete por la operación de las canteras. “Se conoce que hay 25 cuevas que tienen arte rupestre y algunas de las cuevas que fueron destruidas por la actividad minera contenían pictografías y petrográficos que ya se perdieron”, lamentó Veni. Otra contaminación en áreas cerca de canteras y las minas, viene como resultado del uso de explosivos en las voladuras. “Alrededor del 30 % del material explosivo se queda como residuo en el ambiente y el subsuelo, y ese material contamina las aguas subterráneas”, señaló el experto.
RD apoya el envío de cascos azules a Haití, pero Rusia y China lo vetan
Desde Calamar a Quirino y Figueroa Agosto, la Procuraduría entrega bienes al Estado
Legisladores no reportan vehículos exonerados en declaraciones de bienes
La autopista Duarte: el corredor de la muerte
Industriales exigen fortalecer la lucha contra el comercio ilícito