El Dilema de la Libertad: Anunciantes, Musk y la Crisis en X

Marcas dejan de colocar publicidad en X por comentarios de Musk

Continua el debate sobre la regulación de contenido en plataformas digitales

Libertad de expresión vs. contenido perjudicial. (Shutterstock)

Las empresas Apple e IBM decidieron detener sus gastos de publicidad en la red social X por los comentarios de Elon Musk por “apoyo” a comentarios antisemitas y un reporte de la organización Media Matters for Amaerica (MMFA), a la que Musk anunció demandará por difamación y calumnia. Esta situación abre de nuevo el debate sobre la libertad de expresión en estas plataformas sociales.

La filosofía de Musk

Desde que Musk sugirió su idea de comprar la red social Twitter, posteriormente renombrada como X, dejó clara su visión sobre lo que para él es la libertad de expresión en las plataformas sociales.

Musk se ha llenado la boca, y los dedos cuando escribe una publicación, de ser un abanderado de la liberta de prensa.

“Por "libertad de expresión" me refiero simplemente a lo que coincide con la ley. Estoy en contra de la censura que va mucho más allá de la ley. Si la gente quiere menos libertad de expresión, le pedirá al gobierno que apruebe leyes en ese sentido. Por lo tanto, ir más allá de la ley es contrario a la voluntad del pueblo”, explicó Musk en una publicación en X de fecha 26 de abril de 2022.

Para el creador de SpaceX y principal accionista de Tesla, las políticas de verificación y moderación de contenido en las plataformas sociales no eran objetivas y favorecían a temas y personalidades dependiendo de la agenda que estas siguieran.

Con la aparición de cada red social el discurso de libertad de expresión siempre estuvo atado a estas; sin embargo, la expansión y el impacto de estas plataformas en las sociedades dio paso al esparcimiento de desinformación y noticias falsas, lo cual se convirtió en el principal problema a enfrentar para dichas organizaciones.

X/Musk vs anunciantes

El pasado miércoles un usuario publicó que “las comunidades judías promovían el “odio dialéctico contra los blancos” al apoyar la inmigración de minorías, un tema de conversación neonazi común que se ha utilizado para justificar la violencia contra los judíos”, según explica el medio Morning Brew. Pero lo que causó revuelo y viralizó el tema fue la respuesta de Musk “has dicho la verdad”.

Luego la organización Media Matters for America lanzó un reporte en el que aseguran que los anuncios de las marcas como Apple, IBM, Oracle, Xfinity y Bravo aparecen en publicaciones con contenido “pro-Hitler” y “pro-Nazi” en la red social X.

Esto ocasionó que tanto Apple como IBM anunciaran que retirarían y cancelarían su inversión en publicidad en la plataforma.

Musk publicó en X que realizará una demanda “termonuclear” en contra de MMFA, a quienes acusó de querer bloquear la libertad de expresión en la plataforma “porque lo perciben como una amenaza a su narrativa ideológica y de aquellos de quienes reciben financiación”.

Además, explicó que MMFA manipuló su reporte, al crear cuentas alternas y curar publicaciones para que aparecieran las publicidades en el contenido que querían; además, de que forzaron estos escenarios en 13 ocasiones, y que de 5.5 mil millones de impresiones en el día que señala el reporte, menos de 50 en total fueron impresiones orgánicas.

El reporte de MMFA especifica a nueve publicaciones que deben de ser prohibidas en X, pero el equipo de la red social aseguró que solo una de dichas publicaciones viola las políticas de la empresa, según explica el documento publicado por Musk.

Por su parte, la directora ejecutiva de X, Linda Yaccarino, antigua presidenta de ventas de publicidad de NBCUniversal y quien fue traída para mejorar la relación de la empresa y las marcas, aseguró que la compañía “ha sido bastante clara con sus esfuerzos de combatir antisemitas”.

Una relación simbiótica

La relación entre anunciantes y medios sociales es de tipo simbiótica, en los que los primeros y sus equipos de mercadeo se benefician del alcance y exposición de marca que pueden alcanzar sus publicaciones. Mientras que los segundos se benefician con una remuneración económica.

La crisis de anunciantes en X inició desde el primer momento en que Musk asumió el control, pues usuarios y anunciantes expresaron que no estaban de acuerdo con la visión de Musk, llevando a que la mitad de sus anunciantes dejaran la plataforma durante el primer mes del mandato de Musk; y documentos filtrados apuntan que la caída de ingresos publicitarios se redujo en un 59% entre las fechas de abril 2022 y marzo 2023.

X cuenta con 556 millones de usuarios activos mensualmente en 2023, según datos de Statista.

El debate ético

Este tipo de casos abre el debate ético y filosófico sobre la libertad de expresión e irónicamente sus límites; lo que lo hace un tema complejo que incluye la libertad individual, la regulación en la propagación de mensajes de odio y noticias falsas en las plataformas sociales.

¿Dónde inicia y dónde termina la libertad de expresión? ¿Forman parte de la libertad de expresión los discursos de odio? ¿Debemos evitar exista una plataforma que permita una especie de anarquía en la expresión de ideas? O simplemente debemos de ser juiciosos con nosotros mismos, entender que existen ideas diferentes de las que creemos, y que eso no hace mal a la otra persona; pero que si existen acciones que van en favor del orden social que hemos elegido como sociedad y aceptado en nuestras leyes, y que estas si debemos de regular. El debate continúa.

El futuro de los móviles no los incluye

  • Dos antiguos empleados de Apple presentaron la semana pasada un nuevo producto que promete marcar el camino hacia algo completamente diferente, y en esta edición de Martes de Tecnología, te explico de qué se trata y cómo este podría ser el paso hacia algo disruptivo.

    La empresa se llama "Humane" y su dispositivo es un "pin" cuadrado, muy bien diseñado y minimalista, al estilo de Apple. El gadget viene con un micrófono, cámara, un sensor LiDAR y un pequeño proyector. La premisa detrás de este equipo es olvidarnos de nuestro móvil y tener una interacción a través de voz, gestos y toques con un asistente digital. Lo atractivo y sorprendente de este dispositivo es lo difícil que resulta compararlo con algún otro dispositivo en el mercado; lo más cercano sería el sistema operativo de la película de ciencia ficción "Her". El Humane AI Pin cuenta con un procesador Snapdragon (no se especificó el modelo) y está potenciado por GPT de OpenAI. Los usuarios podrán solicitar información de mensajes, correos y demás, así como comandar acciones. Además, al presentar la palma de la mano en cierto ángulo, el proyector se enciende y ofrece una interfaz sencilla que se controla mediante gestos.

    Entre las capacidades mostradas por su cofundador, Imran Chaudhri, se encuentra la capacidad de traducir en tiempo real cuando alguien nos habla en otro idioma. A primera vista, el Humane AI Pin llama la atención y sorprende por lo que es; sin embargo, hay ciertos puntos que debemos tener en cuenta. En primer lugar, necesita conectividad constante para funcionar, por lo que la compra del equipo (US$699) está vinculada a un servicio de internet con una empresa estadounidense que tendrá un costo de 24 dólares mensuales. En segundo lugar, a pesar de que la demostración se realizó en un entorno controlado, algunos de los datos proporcionados por la IA resultaron ser erróneos posteriormente. También existe una limitación significativa en cuanto a las capacidades y la forma en que interactuamos con nuestros móviles.

    Las ideas y capacidades que podría lograr un dispositivo como el Humane AI Pin son variadas e interesantes. Como una MK1 (primera versión), la apuesta es sólida, pero es necesario observar la recepción del mercado y determinar si es un producto adelantado a su tiempo o simplemente no despierta el interés de los consumidores. Sin embargo, estoy seguro de que ha captado la atención de los gigantes del sector.

Comunicador y mercadólogo, especialista en desarrollo de proyectos y marcas, manejo de nuevas tecnologías y analista de deportes y tecnología de consumo.