Pedernales, ahora a la puerta del desarrollo turístico

Los residentes en la provincia de Pedernales y otras demarcaciones de la región sur han esperado por décadas el desarrollo del turismo. Las mafias que se apoderaron de la tierra con vocación turística y el poco interés de algunos gobernantes han imposibilitado las inversiones y el despegue de una industria que contribuirá a cambiar la situación de su gente.

Los esfuerzos de los gobiernos de Leonel Fernández, del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), 1996-2000 y 2004-2012; de Hipólito Mejía, del Partido Revolucionario Dominicano (PRD), 2000-2004; de Danilo Medina (del PLD), 2012-2016-2020; y ahora el de Luis Abinader, del Partido Revolucionario Moderno (PRM), han marcado la ruta definitiva de ese anhelado desarrollo. Las condiciones están dadas para impulsar los proyectos en carpeta y atraer más inversionistas; además, la gente de esa región no perdonará que esta vez las autoridades les fallen.

Con Leonel Fernández se inició el proceso de saneamiento de esas tierras; llevó a la cárcel a exfuncionarios del gobierno de Joaquín Balaguer y amigos del régimen que se apoderaron de miles de tareas de playa con vocación turística y bloquearon por décadas el desarrollo de la región; Hipólito Mejía continuó ese proceso e intentó (en un esfuerzo por provocar el despegue del turismo) declarar los terrenos de utilidad pública, pero en el fondo era reconocer derechos a los que aprovecharon la corrupción para despojar al Estado de esos terrenos.

Ese proceso de varios gobiernos no logró avances en los últimos ocho años de Fernández, porque priorizó otros asuntos. Pero la llegada de Danilo Medina al poder, en el año 2012, puso a Pedernales y al sur en el centro de sus políticas con una perspectiva de desarrollo diferente, y era lógico, porque es un hombre sureño (de la provincia San Juan). Medina decidió hacer una consulta y con los resultados que logró tomó la firme determinación de iniciar una lucha legal que mantuvo por casi ocho años hasta que logró que la Justicia fallara a favor del Estado, con lo que se han abierto las puertas para ese esperado desarrollo.

Ahora el presidente Luis Abinader ha decidido darle continuidad a ese tema y eso hay que aplaudirlo, primero, porque demuestra continuidad de Estado y, segundo, porque es una de las pocas vías para crear empleos y generar riquezas en la empobrecida región sur. Tan pronto se juramentó como presidente visitó la zona, prometió el desarrollo y hace unos días emitió un decreto mediante el cual crea un fideicomiso que es la garantía para que comiencen a llegar los capitales, obras importantes del Gobierno Central y los esperados proyectos turísticos a Pedernales y su entorno.

Ese fideicomiso, que dirige el ministro de la Presidencia, Lisandro Macarrulla, va a permitir que esos proyectos hoteleros que dejó el expresidente Danilo Medina en carpeta, que son muchos, y otros que llegarán por las garantías de inversión que les darán a los inversionistas, marquen el dinamismo económico y social de la empobrecida zona, pero estratégicamente importante para mantener la población dominicana en la franja fronteriza.

Los proyectos hoteleros están ahí; el exministro de Turismo Francisco Javier García los presentó junto al expresidente Medina, incluso llevaron al lugar a empresarios canadienses interesados en hacer grandes inversiones. Ahora con el fideicomiso, esos inversionistas y otros comenzarán a invertir. Lo que observamos es que no hay vuelta atrás, es un esfuerzo de varios gobiernos que dará buenos resultados. Pronto Pedernales comenzará a cambiar, tendrá un buen aeropuerto, buenas carreteras, acueductos, miles de empleos, mercado para sus productos y el esperado desarrollo de la región. Además, ese desarrollo de Pedernales también impactará en Barahona y en la mayoría de las provincias de la región.