La Loma de Miranda, el PNUD y la globalización
El conflicto vivo y presente sobre la explotación de la Loma de Miranda es un tema político, económico y social de alto interés nacional por las devoradoras consecuencias que pudiera tener para el Estado dominicano, las instituciones de la sociedad civil y los derechos ciudadanos que legitiman la democracia.
La Loma de Miranda es parte de la Patria de Duarte, que es la patria de todos los dominicanos y dominicanas . Y en el marco de la celebración del bicentenario del nacimiento del Padre de la Patria el tema de la defensa de la Loma Miranda se torna más patriótico y reverente. Considerada la segunda reserva del país, con unos 30 kilómetros cuadrados de bosques nublados, contiene grandes reservas acuíferas que sustentan el desarrollo de la agricultura del principal centro de producción agrícola del país, el valle de la Vega Real; alimenta la presa de Rincón y abastece de agua potable a San Francisco de Macorís, La provincia Hermanas Mirabal, Jima, Fantino, Ranchito y decenas de comunidades a través del acueducto central Rincón -Macorís.
Al poner en riesgo tan valiosos recursos y la calidad de vida de tantos ciudadanos la iniciativa de explotación de la Loma de Miranda se convierte en altamente riesgosa, dañina y peligrosa. Y frente a esta realidad tenemos que actuar para proteger uno de los principales comunes nacionales, primero nosotros y, si quiere, otros después. En este escenario resulta cívicamente ejemplarizante el que a las miles de voces de ciudadanos y organizaciones ecologistas del país que se oponen a la explotación de la Loma La Miranda se hayan sumado las de tres prestigiosas instituciones académicas del país.
Por un lado, la Academia de Ciencias de la República Dominicana se ha pronunciado en contra de la explotación de la Loma de Miranda, basándose en estudios que demuestran que ello conllevaría la destrucción de una reserva acuífera que afectaría profundamente la agricultura y el abastecimiento de agua potable a docenas de comunidades. Por su parte el INTEC "propone elevar el debate y coadyuvar a la posible solución del conflicto socioambiental de la explotación de la Loma de Miranda acogiéndose a lo dispuesto en la legislación general de medio ambiente, debiendo el análisis estar sujeto a los reglamentos complementarios y a las demandas de las organizaciones ambientalistas, la sociedad civil y la Academia de Ciencias".
De la misma manera, y con demostrada valentía científica y social, se expresa la Universidad Autónoma de Santo Domingo: "sea cual fuere la opinión de la consulta del PNUD, consideramos que la Loma de Miranda es un enclave natural de gran importancia que no puede ser destruido bajo ninguna circunstancia y que debe ser incorporado al Sistema Nacional de áreas protegidas por su valor hidrológico, la biodiversidad contenida, las ecodinámicas en proceso y el valor paisajístico y la suma de servicios ambientales que soportan la economía de numerosas comunidades". La UASD presentó su posición al Senado de la República y al Ministerio de Medio Ambiente, avalada por biólogos, geólogos, geógrafos e ingenieros que conforman la Comisión Ambiental de la institución. Pareciera que quedan pendientes de escucharse las voces de las otras cuarenta universidades del país y de otras muchas instituciones democráticas.
Sin embargo, ignorando el peso de estas opiniones provenientes de comunidades, instituciones y expertos nacionales con alta fe pública, el gobierno dominicano a través del Ministerio de Medio Ambiente solicitó la intervención del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo, PNUD, para revisar y validar los resultado del estudio de impacto ambiental elaborado, en calidad de juez y parte, por la empresa Falcondo Xstrata Nickel. La noticia fue anunciada en el Palacio Nacional con la presencia de la Representante del PNUD en la República Dominicana, la señora Valerie Julliand y el Ministro de Medio Ambiente Doctor Bautista Rojas. Todo aparenta que el PNUD fue rápido en aceptar la invitación pero lento en emitir su parecer. De ahí que no se sabe si su "invitación" responde a la intención de que desempeñe un papel de mediador o de mediatizador en el conflicto.
Pero estas cosas no suceden al azar, son características propias del paradigma de la globalización, fenómeno que tiene algo que ver con la tesis de que todos vivimos en un mismo mundo, pero al que Held y McGrew (2007) se refieren con marcado patetismo cuando expresan: "la globalización está creando un vacío en los Estados, está erosionando su soberanía y su autonomía. Las instituciones y los agentes políticos estatales se parecen cada vez a «zombies» que actúan en el escenario político pero que son incapaces de determinar ningún bien público sustancial que promueva el bienestar social". Se puede hablar también de una globalización positiva, pero este no es el caso.
Considerada o no como una treta globalizadora, pudiera resultar prudente el esperar el tiempo fijado por el PNUD para rendir su informe-veredicto. Pero lo que si puede considerarse claramente imprudente es sujetar el sentido de nuestra lucha a su verdad y a su tiempo. Sin dejar de poner la mirada en el mundo, defenderemos la no explotación de la Loma Miranda como patrimonio de los dominicanos. El decoro patriótico inspirado por Duarte nos empodera para descubrir nosotros mismos la verdad y para defenderla fervientemente por todos los medios participativos y democráticos. !Y así lo haremos, a sabiendas que nos esperan otras luchas y otras defensas de los recursos naturales y el patrimonio de la patria!