Oportunidad perdida
La Cámara de Diputados rechazó el nombramiento de una comisión para investigar la denuncia de varios diputados del Partido Revolucionario Moderno acerca de unos pagos por servicios prestados al Gobierno por empresas del señor Joao Santana y esposa, que, a su vez, fueron asesores de la campaña del presidente Medina.
Estas denuncias son propias del juego legislativo, en el cual la oposición trata de poner en entredicho la conducta de la Administración.
El caso era particularmente interesante porque la documentación que aportaron los diputados del PRM fue suministrada, como debe ser, por oficinas del Gobierno. Es decir, es información que no puede ser puesta en duda.
En este caso, lo correcto era designar una comisión que investigara la denuncia y escuchara las explicaciones de todas las partes envueltas. Ganaban los diputados que cumplían con su deber constitucional y si el Gobierno tenía sus cuentas claras, ganaba también.
Con el rechazo queda la duda y los diputados perdieron una oportunidad de ejercer su papel de contrapeso en un gobierno democrático. Es una pena.