Vivir en el pasado

Un extranjero que nos visita asiduamente, me comentaba el otro día sobre la característica dominicana de vivir en el pasado.

Los políticos sólo hablan de los gobiernos pasados. Los gobernantes le echan la culpa de todo al “gobierno pasado”, y los comentaristas deportivos se la pasan hablando de los jugadores del pasado.

Los más viejos añoran a Trujillo y a la “revolución”. La moda son los “merengues de los 80”, o los boleros de los 50, cantados por nuevas voces, y hasta Gardel “cada día canta mejor”, y murió hace 80 años.

Pareciera que no hay presente o que desdeñamos el futuro.

Sin embargo, nunca hemos estado mejor.

Esa añoranza del pasado nos impide ver lo bueno del presente, y lo brillante que sería el futuro dominicano si nos dedicáramos a construirlo con ahínco.

Pero le hemos dejado el futuro al Gobierno y a los políticos, y ellos sólo piensan en el presente y en lo suyo. Los políticos en las próximas elecciones (sin olvidarse de las pasadas para seguir cometiendo las mismas equivocaciones), y el Gobierno en aprovechar todas las oportunidades para mantenerse en el poder a como dé lugar.

Si el tiempo que invertimos en criticar al país, a nosotros mismos y a nuestra suerte, lo dedicáramos a trabajar y a construir un mejor porvenir, las cosas cambiarían para bien y para todos.

Tenemos sobrados motivos para creer que otro mundo es posible. Sólo tenemos que dejar de vivir en el pasado.

atejada@diariolibre.com