Ucrania, blanco de un ataque masivo ruso al día siguiente de su independencia

Tras una noche de alertas aéreas, Ucrania vuelve a ser víctima de un ataque a gran escala lanzado por Rusia. Desde esta mañana, todas las regiones ucranianas son blanco de misiles y drones rusos. El ataque seguía en curso el lunes por la mañana, y se teme una nueva salva de misiles sobre Kiev. Hubo varias alertas durante la noche y por la mañana se produjeron varios ataques combinados, misiles y drones. Todo el país está en alerta y varias regiones ya han sido alcanzadas. Ha habido explosiones en Lutsk, donde murió una persona, Járkov, Dnipro, Odesa, Kriviy Rih y Vinnytsia, entre otras, así como en la capital, Kiev, informa nuestra corresponsal local Emmanuelle Chaze.

“Quince regiones han sido golpeadas hoy por un ataque masivo ruso. El enemigo utilizó diferentes tipos de armas: drones, misiles de crucero, 'Kinjal' (misiles hipersónicos, nota de la redacción)”, declaró el primer ministro Denys Chmygal en su cuenta de Telegram. También en Telegram, los jefes de las regiones de Dnipropetrovsk, en el sureste del país, y Zaporiyia, en el sur, así como el alcalde de Lutsk, en el noroeste, informaron de una baja en cada una de sus zonas.

Una vez más, las infraestructuras energéticas se han visto afectadas, con cortes de electricidad en todo el país. También se han producido ataques contra plantas de tratamiento de agua en Kiev.

El operador energético ucraniano DTEK también ha anunciado algunos cortes de electricidad. “Los ingenieros eléctricos están trabajando para restablecer el suministro”, dijo el ayuntamiento de la capital en un comunicado. El ataque del lunes también tuvo como objetivo instalaciones eléctricas de la región de Lviv, en el oeste del país. “Como consecuencia, hay cortes parciales de electricidad en Lviv y en la región”, dijo su gobernador, Maksym Kozytsky, en Telegram. Antes, un atentado contra una instalación industrial en la región central de Poltava causó heridas a cinco personas, informó el gobernador Filip Pronin.

Los rusos están acostumbrados a este tipo de ataques, así que no es realmente una sorpresa, sobre todo porque se esperaba que Moscú lanzara un ataque en torno al aniversario de la independencia de Ucrania, que se celebra el 24 de agosto.

Los ataques rusos contra Ucrania son cotidianos. Este domingo, en Kramatorsk, un misil Iskander alcanzó un hotel, hiriendo a dos periodistas de Reuters y matando a su guardia de seguridad. Así que el peligro está en todas partes, y además es cotidiano. El Kremlin había prometido una respuesta contundente a la incursión de Kursk, pero estos bombardeos contra infraestructuras civiles más que militares llevan afectando a Ucrania en su conjunto desde febrero de 2022 y en el este del país desde 2014.