'Operación Crisálida': los secretos de Francia sobre la entrega de misiles Scalp a Ucrania

Ucrania lleva meses pidiendo a sus aliados más armas para intentar frenar el avance de Rusia. RFI revela una operación secreta y un esquema industrial sin precedentes que ha llevado a cabo Francia para abastecer a las fuerzas ucranianas con misiles de crucero Scalp sin afectar sus propias reservas militares.

Llamaron esta operación ultrasecreta "Crisálida", en referencia a la metamorfosis de la oruga en mariposa. Francia cuenta con numerosos lotes de misiles de crucero Scalp en "capullos", es decir, que han llegado al final de su vida útil y solo queda una carcasa hermética.

La operación consistió en volverlos de nuevo utilizables y venderlos a bajo coste a Ucrania. "Fue un enfoque económico muy eficaz, ya que los Scalp que salieron de los capullos estaban destinados a ser destruidos", dijo a RFI una fuente cercana al asunto. "Así que se entregaron a Ucrania por una cuarta parte del valor de un misil nuevo".

La operación está financiada por el fondo francés de ayuda a Ucrania. Los primeros Scalp se empezaron a entregar en el segundo semestre de 2023.

El primer disparo tuvo como objetivo un centro de mando ruso en la provincia de Luhansk, hasta entonces fuera del alcance del arsenal ucraniano.

Los misiles Scalp franceses, con sus 300 kilómetros de alcance, han sido los artífices de la victoria de Ucrania en el Mar Negro.

El Scalp también participó en la destrucción de importantes recursos logísticos que abastecían al frente ruso.

Su ojiva penetrante puede destruir fortificaciones enterradas. Puede penetrar varios metros en el hormigón y detectar la cavidad donde se detonará su carga de 450 kg. Su gran precisión le permite perforar un agujero en el que puede introducirse un segundo misil. Además, puede volar sin GPS.