Tener una vida sexual activa reduce las probabilidades de morir

Científicos de diferentes universidades del mundo llegaron a esa conclusión luego de entrevistar y monitorizar a más de 15,000 personas durante más de una década

La cifra específica corresponde a una disminución de hasta un 49 % de posibilidades de morir. (Freepik)

En múltiples ocasiones hemos escuchado hablar de los tantos beneficios para la salud que tiene el sexo. Contribuye al sistema inmunitario, ayudarnos a liberar estrés y mejorar nuestro estado de ánimo son de los más comunes. Sin embargo, una investigación realizada en Estados Unidos revela que tener relaciones sexuales también podría ser la clave para aumentar nuestros años de vida.

Científicos de diferentes universidades del mundo llegaron a esa conclusión luego de entrevistar y monitorizar a más de 15,000 personas durante más de una década; el 72 % correspondía a adultos que practican sexo al menos una vez al mes, un 36 % que sostenía relaciones sexuales una vez a la semana y un 7 % que no tenía sexo en lo absoluto.

Los resultados, según reseña el portal Código Nuevo, desvelaron que, del grupo total de participantes, 228 murieron en el transcurso de la investigación, a causa de enfermedades cardiovasculares o algún tipo de cáncer. Los profesionales utilizaron datos de los archivos de mortalidad del Examen Nacional de Salud y Nutrición (NHANES) para obtener información sobre las muertes. Dicha muestra incluyó a 7,765 hombres y 7,504 mujeres, con edad promedio de 39 años.

Pero, ¿cómo se relaciona esto con el sexo?, sencillo: según los autores, tener relaciones sexuales de manera frecuente promueve la acción de las células asesinas naturales, las cuales ayudan a reducir las probabilidades de padecer enfermedades pulmonares y víricas, al igual que el cáncer.

En pocas palabras, los investigadores aseguran que, basados en estos hallazgos, mientras más sexo tengas, menor serán tus probabilidades de morir. La cifra específica corresponde a una disminución de hasta un 49 % de posibilidades de morir, frente a las personas que solo sostienen intimidad una vez al año o nunca.

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